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El juez encargado de la investigación sobre la muerte de Liam Payne, ex integrante de One Direction, imputó al gerente y a la recepcionista del hotel CasaSur Palermo en Buenos Aires, tras encontrar “motivos suficientes” para sospechar de su posible implicación en el trágico incidente.
Ambos empleados, quienes tuvieron contacto directo con Payne antes de su caída mortal desde el tercer piso, deberán comparecer ante la justicia el próximo 19 de diciembre.
“Al existir suficientes motivos para sospechar que han participado en el hecho investigado, solicitamos que las siguientes personas presten declaración”, señala el documento obtenido por un medio de comunicación.
Caso Liam Payne: Nuevas imputaciones en investigación por su muerte
La imputación se basa en las llamadas de emergencia realizadas por la recepcionista, quien reportó que Payne había consumido “demasiadas drogas y alcohol”. Además de que estaba “destrozando toda la habitación” y cuya vida “podría estar en peligro”.
Además, la investigación también involucra a dos personas acusadas de suministrarle drogas. Quienes deberán declarar el 17 de diciembre. Y a un amigo cercano del cantante, señalado por abandono de persona, seguido de muerte, quien comparecerá el 18 de diciembre.
La autopsia reveló que Liam Payne murió a causa de múltiples traumatismos, hemorragias internas y externas, y una lesión craneal provocada por la caída.
El informe toxicológico mostró la presencia de alcohol, cocaína y un antidepresivo recetado en su sistema.
La última actualización en el caso llega días después de que el abogado acusara a la fiscalía de “graves irregularidades” en el manejo de la investigación.
Según el abogado, los fiscales no habían revisado las imágenes de una cámara cercana al lugar de la caída. A pesar de que se sabía que el gerente del restaurante del hotel tenía acceso a dicho material.
“Dado todo lo mostrado, está claro que no ha habido una investigación seria, profunda ni, al menos hasta ahora, seria”, se lee en el expediente.