• Seguridad
  • Cristian Mastranzo Garrido
Más grave fue el incidente reportado en Contla de Juan Cuamatzi, donde un grupo de aproximadamente 10 sujetos armados ingresó violentamente a un domicilio durante la madrugada, amagando a 15 integrantes de una familia.

 La inseguridad sigue latente en diversos municipios del estado de Tlaxcala, donde los robos a casa habitación se han convertido en una constante que preocupa a la ciudadanía. En las últimas horas se registraron múltiples incidentes, la mayoría de ellos sin intervención inmediata ni resultados efectivos por parte de las autoridades.

Uno de los casos ocurrió en Huamantla, en el Fraccionamiento Siglo XXI, donde vecinos reportaron a través del 911 que tres o cuatro individuos estaban robando materiales de construcción —castillos y láminas— de una vivienda en obra negra. Los presuntos responsables operaban a pie y sin vehículos, según se informó. A pesar del llamado oportuno, no se reportaron detenciones ni resultados por parte de las autoridades.

En otro hecho, también en Huamantla, se atendió un robo a casa habitación con violencia, ocurrido la noche del 12 de abril en la calle Jesús Carranza esquina con Moctezuma. 

La víctima persiguió al ladrón tras sorprenderlo dentro de su domicilio. Gracias a su rápida acción y coordinación con la policía municipal, se logró asegurar a un masculino presuntamente responsable del delito.

Más grave fue el incidente reportado en Contla de Juan Cuamatzi, donde un grupo de aproximadamente 10 sujetos armados ingresó violentamente a un domicilio durante la madrugada, amagando a 15 integrantes de una familia. 

Los agresores sustrajeron dos vehículos (una camioneta Ford Lobo y un Jetta), 400 mil pesos en efectivo, joyas y celulares. La familia se trasladó por sus propios medios a realizar la denuncia, pero se enfrentaron a la falta de personal del Ministerio Público tanto en la policía municipal como en la Fiscalía estatal, por lo que su reporte se formalizó hasta cuatro horas después del ataque.

En Amaxac de Guerrero, se registró otro hecho violento donde las víctimas pidieron una ambulancia en medio del robo, y se escuchó en la llamada cómo los agresores solicitaban información bancaria a los habitantes. La confusión y el temor fueron evidentes durante la llamada de auxilio, que posteriormente fue abandonada.

Estos casos reflejan una creciente preocupación social ante la falta de respuesta inmediata y efectiva por parte de las autoridades de seguridad. 

Aunque se han activado protocolos con apoyo de diversas instancias como la SSC, FGJE, SEDENA y Guardia Nacional, los resultados tangibles siguen siendo escasos.

Las familias tlaxcaltecas exigen acciones contundentes y coordinación real entre las corporaciones para frenar esta ola de robos que vulnera su seguridad y su patrimonio.

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