• Tenancingo
  • Erika Pérez
El padre de la presunta víctima manifestó su preocupación al no obtener información clara sobre el paradero de su hija y su nieta.

La Fiscalía General del Estado investiga un posible caso de trata de personas en el municipio de Tenancingo, luego de que una joven madre desapareciera junto con su hija de un año tras ser presuntamente explotada sexualmente por su pareja sentimental.

El caso quedó registrado cuando el C5 Yucatán recibió una llamada de emergencia desde el estado de Quintana Roo, en la que Ana Victoria N., reportó que su hermana, Fátima N., era víctima de prostitución forzada por parte de su esposo, identificado como Óscar N., quien la habría enviado a trabajar a Tijuana en condiciones de explotación.

Con esta información, Fátima N., y Óscar N., salieron de la vivienda ubicada en Calle 9 Poniente número 13, San Miguel Tenancingo, con el argumento de que irían a comprar pañales para la menor de edad, Keyti, su hija de tan solo 1 año. Desde entonces, no han regresado al domicilio, lo que activó las alertas entre los familiares.

El padre de la presunta víctima manifestó su preocupación al no obtener información clara sobre el paradero de su hija y su nieta. Indicó que recibió un mensaje vía telefónica supuestamente enviado por Fátima N., asegurando que “no quiere regresar”, sin embargo, la familia sospecha que el mensaje no fue escrito por ella.

Elementos de la Fiscalía General del Estado de Tlaxcala informaron que han sostenido comunicación con Ana Victoria N., quien reiteró que su hermana ha sido víctima de explotación en diversos estados y teme por su integridad y la de la menor.

Autoridades ya realizan las investigaciones correspondientes para localizar a Fátima N., del Rosario y a su hija, y determinar si existen elementos para proceder por el delito de trata de personas. Por ahora, la familia permanece a las afueras del domicilio esperando noticias, mientras piden la intervención urgente de las instituciones de seguridad y justicia.

Este caso se suma a la creciente preocupación por los delitos de explotación sexual y desaparición de mujeres en la región, donde Tenancingo ha sido históricamente señalado como un foco rojo en materia de trata de personas.