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  • Adolfo Tenahua Ramos
Este acto, además de enaltecer una memoria colectiva muchas veces olvidada, fortalece la identidad tlaxcalteca.

En un acto de profunda carga simbólica y cultural, la diputada Laura Flores Lozano ocupó la máxima tribuna  del Congreso del Estado de Tlaxcala  para solicitar la inscripción del nombre de la Princesa Guerrera Teculhetzin Xicohténcatl en el Muro de Honor de la Sala de Sesiones del Palacio Juárez en el marco de la declaratoria de 2025 como el Año de la Mujer Indígena.

La legisladora al hacer uso de la palabra sostuvo que Teculhetzin Xicohténcatl, fue una figura histórica de valentía y dignidad, es reconocida por su papel decisivo durante el periodo de la Conquista. 

Su liderazgo y visión permitieron sentar las bases de un Tlaxcala autónomo, consciente de su papel en la historia nacional. Con esta distinción, su legado se inscribe de manera permanente en el espacio donde se definen las leyes del estado, como un acto de justicia heroica y reivindicación histórica.

Flores Lozano enfatizó que este reconocimiento "representa la memoria viva de las mujeres tlaxcaltecas, especialmente de aquellas que, desde su raíz indígena, han luchado por la dignidad, el territorio y la identidad de nuestros pueblos". 

Asimismo, subrayó la urgencia de promover políticas públicas con enfoque interseccional para las mujeres indígenas, a fin de saldar una deuda histórica con este sector históricamente invisibilizado.

“El nombre de Teculhetzin Xicohténcatl no es solo una inscripción en piedra: es una reconstrucción necesaria de nuestra narrativa, un recordatorio de que las mujeres indígenas han sido protagonistas —no sólo testigos— de nuestra historia”, añadió.

La figura de Teculhetzin trasciende su origen local; su influencia y legado se proyectan más allá de las fronteras de Tlaxcala, como un símbolo de liderazgo femenino, autodeterminación y resistencia cultural.

Este acto, además de enaltecer una memoria colectiva muchas veces olvidada, fortalece la identidad tlaxcalteca y abre camino a una visión más justa, equitativa y plural de la historia que se enseña y se honra en las instituciones públicas.