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A partir de ahora, en Tlaxcala nadie podrá obtener o renovar su licencia de conducir sin antes comprobar que está al corriente con el pago de pensión alimenticia. La medida busca reforzar la responsabilidad familiar y se aplicará sin distinción de género.
En Tlaxcala, ponerse al volante ahora implica más que solo saber manejar. A partir de este año, cualquier ciudadano que desee tramitar o renovar su licencia de conducir deberá presentar una constancia de no ser deudor alimentario. Esta disposición, implementada por la Secretaría de Movilidad del estado, se suma a los documentos tradicionales como la credencial de elector, la CURP y, en caso de renovación, la licencia anterior.
La intención detrás de esta medida es clara: garantizar el cumplimiento de las obligaciones alimenticias y proteger el bienestar de los menores y personas dependientes. Y aunque el objetivo parece loable, la decisión no ha pasado desapercibida.
Mientras algunos aplauden esta acción como un avance en la lucha contra la irresponsabilidad parental, especialmente en casos donde los padres se desentienden de sus responsabilidades, otros la ven como una medida extrema que puede complicar la vida de quienes enfrentan procesos legales aún no resueltos.
Lo cierto es que no hay excepciones. La constancia será exigida por igual a hombres y mujeres, sin importar el tipo de trámite. Quienes busquen obtener o renovar su licencia deberán gestionar el documento ante las autoridades competentes antes de acudir a las oficinas de la Secretaría de Movilidad.
Este nuevo filtro en el sistema vial tlaxcalteca no solo pone freno a los autos, sino también al incumplimiento familiar.