- Zacatelco
La violencia y el miedo se han convertido en parte del día a día en Zacatelco, donde la delincuencia actúa con total impunidad y a plena luz del día. El caso más reciente fue un asalto con lujo de violencia a una tienda de abarrotes, cometido aescasos metros de la comandancia de la policía municipal. El hecho no solo indignó a vecinos y comerciantes, sino que evidenció lo que muchos ya sabían: el gobierno de José Miguel Acatzi Luna está rebasado.
Lejos de mostrar firmeza, el alcalde ha optado por los discursos vacíos y promesas que no se cumplen. Mientras la población exige seguridad y resultados, el edil parece más enfocado en la simulación que en enfrentar el verdadero problema que azota a su municipio.
A pesar de los anuncios sobre la implementación de tecnología, cámaras y “reorganización” del cuerpo policiaco, los hechos hablan por sí solos: asaltos constantes, robos a casa habitación, violencia contra negocios y una presencia policial meramente decorativa.
Vecinos afirman que los patrullajes son esporádicos, las denuncias no prosperan y la respuesta ante emergencias es lenta o nula. Comerciantes, por su parte, temen cerrar sus negocios debido al constante acoso del crimen. Zacatelco ha pasado de ser un municipio con vida comercial y social activa, a un territorio donde la gente prefiere encerrarse temprano por miedo.
El colmo, según ciudadanos, es que la autoridad municipal no solo no actúa, sino que se muestra indiferente ante los señalamientos. Incluso, tras la llegada del Mando Coordinado, el gobierno de Acatzi Luna sigue sin asumir su responsabilidad directa, escudándose en otras instancias.
“Hoy Zacatelco no tiene rumbo. El presidente municipal ha demostrado incapacidad para gobernar. La seguridad se le fue de las manos, y la población está pagando las consecuencias”, sentenció un comerciante del centro.
La administración de Acatzi Luna comienza a ser vista como una de las más débiles en la historia reciente del municipio. Y si no hay un cambio inmediato, Zacatelco corre el riesgo de convertirse en un foco rojo para todo el sur del estado.