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En plena contención del gasto público y tras la negativa oficial para ampliar el presupuesto del Tribunal Electoral de Tlaxcala (TET), su presidente, Miguel Nava Xochitiotzi, aprobó un bono especial para sí mismo y todo el personal, bajo el concepto de “proceso electoral abril que en su caso ascendió a 220 mil 386 pesos.
Aunque el Ejecutivo como el Congreso del Estado le negaron una solicitud de ampliación presupuestal por más de 16 millones de pesos, argumentando que no estaba suficientemente justificada, el magistrado encontró otra vía para beneficiarse financieramente: autorizar compensaciones internas bajo conceptos poco claros, amparado en un proceso electoral ya concluido.
El tabulador de sueldos y prestaciones del TET para 2025 —publicado en el Periódico Oficial del Estado— revela que Nava Xochitiotzi percibe además un salario bruto mensual cercano a los 90 mil pesos, dividido entre sueldo base, compensaciones y una “canasta básica” de más de 2 mil 500 pesos.
Pero su ingreso no se limita al pago mensual. El magistrado también recibe bonificaciones periódicas y apoyos especiales que, sumados, superan ampliamente el millón de pesos anuales. Entre ellos se incluyen pagos por funciones jurisdiccionales, estímulos administrativos, apoyos por desarrollo laboral, primas, aguinaldo, y hasta una gratificación
De esta manera, el titular del TET optó por autorizar recursos adicionales de manera interna, en una decisión que ha generado críticas por su opacidad y por contradecir el discurso de austeridad que impera en otros órganos públicos.
Mientras organismos como el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) sí lograron obtener ampliaciones presupuestales, en el TET el intento fracasó. No obstante, el magistrado presidente halló una salida alterna para garantizarse un bono personal sustancial, sin importar el rechazo externo a su solicitud formal de más recursos.