• Política
  • Adolfo Tenahua Ramos
El político tlaxcalteca subrayó que la tribuna no puede usarse para ofender ni dividir, sino para generar acuerdos y fortalecer la vida democrática del país.

El político tlaxcalteca Juan Carlos Sánchez García se pronunció con firmeza sobre el actuar de ciertos legisladores que, a su juicio, han degradado la imagen del Senado de la República al convertirlo en un escenario de confrontaciones, contradicciones e hipocresías.

Sánchez García, quien  fue diputado local por el distrito V y que se distinguió por construir consensos con sus compañeros de legislatura en favor de la ciudadanía tlaxcalteca, lamentó que hoy la máxima tribuna del país haya sido tomada por personajes como Gerardo Fernández Noroña, Adán Augusto y Alejandro “Alito” Moreno, quienes —dijo— han caído en la práctica del doble discurso.

“Lo que debería ser un espacio para defender al pueblo, se ha convertido en una cueva de discursos vacíos y actitudes de circo”, señaló.

Respecto a Noroña, Sánchez García fue contundente: recordó que durante años el senador se proclamó como adalid de la austeridad y la congruencia, rechazando lujos y excesos. Sin embargo, hoy, apuntó, se contradice al afirmar que no está obligado a ser austero. “Eso es una falta de respeto a los principios que tanto enarboló y a la confianza del pueblo que lo escuchó y creyó en él”, expresó.

El político tlaxcalteca subrayó que la tribuna no puede usarse para ofender ni dividir, sino para generar acuerdos y fortalecer la vida democrática del país.

 “Yo no estoy a favor de la violencia, pero sí creo que la experiencia vivida recientemente debe hacer reflexionar a quienes se conducen con prepotencia y con un lenguaje de odio”, comentó.

La postura de Sánchez García no solo refleja su visión crítica, sino también su autoridad moral y política para señalar las incongruencias del actual escenario nacional. Su experiencia como legislador y su compromiso con la ciudadanía tlaxcalteca le otorgan un peso particular en un debate que, cada vez más, exige congruencia, responsabilidad y verdadera vocación de servicio.