• Hueyotlipan
  • Adolfo Tenahua Ramos
La versión oficial se derrumbó con la evidencia obtenida en los registros de transparencia: no hubo compra, solo un contrato de arrendamiento.

El presidente municipal de Hueyotlipan, Sóstenes Bedolla Espinoza, quedó como un mentiroso luego de que un documento de transparencia revelara que el camión recolector de basura “YUAWI”, presentado como uno de los primeros grandes logros de su administración 2024-2027, no fue comprado sino rentado, contradiciendo el discurso oficial con el que intentó vender eficiencia y responsabilidad a la ciudadanía.

En febrero de 2024, apenas meses después de iniciar su gestión, Bedolla organizó un evento con tintes propagandísticos para anunciar la supuesta adquisición del vehículo.

El acto fue difundido como muestra de la “estrecha colaboración” con el gobierno estatal y de la capacidad del edil —postulado por Movimiento Ciudadano (MC)— para optimizar recursos públicos.

Sin embargo, la versión oficial se derrumbó con la evidencia obtenida en los registros de transparencia: no hubo compra, solo un contrato de arrendamiento, lo que deja en entredicho no solo la veracidad de su palabra y que pone en juego la honestidad y transparencia del propio alcalde.

La situación ha generado indignación entre habitantes de Hueyotlipan, quienes ahora cuestionan qué otros anuncios de Bedolla podrían estar maquillados para inflar su imagen. Lo que el edil presumió como un “logro en menos de 60 días”, terminó por ser una mentira oficializada en boletines pagados con recursos públicos.