• Apetatitlán
  • Cristian Mastranzo Garrido
Este caso deja en evidencia la irresponsabilidad de Azain Ávalos y su gobierno: promesas falsas, obras fantasma y un desprecio absoluto por el bienestar ciudadano.

Vecinos de la Calle Gavillero explotaron contra el alcalde Azain Ávalos Marbán, luego de que la obra que “inauguró” con fotografías y discursos quedó completamente abandonada desde el primer día. A más de dos meses del banderazo oficial, no hay avances, no hay maquinaria, no hay trabajadores. Solo escombros, peligro y un evidente desprecio por la ciudadanía.

Lo que el presidente municipal presentó como una rehabilitación importante es hoy una trampa mortal, ya que son visibles los registros abiertos, montones de tierra, calles intransitables y ratas saliendo de los drenajes. El lugar parece zona de desastre, no una obra en proceso.

“Vino a tomarse la foto y se largó. Aquí no ha regresado nadie. Nos dejó una porquería que pone en riesgo a niños, adultos y a todos los que pasamos”, denunció una vecina indignada.

Los testimonios coinciden en que la obra fue puro montaje. Ni señalética, ni medidas mínimas de seguridad, ni respeto por la gente. Incluso se han reportado caídas y accidentes, mientras el Ayuntamiento permanece en silencio total.
 Este caso deja en evidencia la irresponsabilidad de Azain Ávalos y su gobierno: promesas falsas, obras fantasma y un desprecio absoluto por el bienestar ciudadano.

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