- Tlaxcala
La región Tlaxcala–Puebla entra a una fase de alto riesgo por el abasto de gas LP. La Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas Licuado y Empresas Conexas (Amexgas) lanzó una alarma contundente: durante lo que resta de noviembre, el suministro del energético será racionado debido a los ajustes logísticos —opacos y sin explicación clara— que mantiene PEMEX.
Esto significa que no habrá gas suficiente para cubrir la demanda habitual, y las afectaciones podrían sentirse desde esta misma semana en hogares, negocios, cocinas económicas, restaurantes y cualquier servicio que dependa del combustible.
La advertencia es directa:
si la gente no se prepara, podría quedarse sin gas en momentos críticos.
La información fue revelada primero por Milenio y encendio las alertas en toda la región. Distribuidores advierten que esta medida traerá retrasos severos en entregas, disponibilidad reducida y largas listas de espera, generando un escenario de tensión para miles de consumidores.
Mientras PEMEX asegura que todo se debe a “ajustes logísticos”, en la calle la percepción es otra: un abasto debilitado que podría detonar un verdadero problema regional si la situación se prolonga.
Ante este panorama, la recomendación es llenar tanques y no esperar al último momento, porque el suministro será limitado y la demanda, más alta que nunca.


