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El dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Tlaxcala, Enrique Padilla Sánchez, condenó enérgicamente la represión ejercida por el gobierno federal durante y después de la marcha de la “Generación Z” en la Ciudad de México, donde varios jóvenes fueron detenidos tras una intervención policial.
Padilla calificó como “increíble” que un gobierno que se autodefine como de izquierda sea el que ahora promueve la represión, el enfrentamiento entre mexicanos y la censura de voces críticas. “México vive una tragedia en materia de seguridad, de finanzas públicas, de soberanía alimentaria y energética. Y ahora también vive una tragedia de libertades, porque el gobierno reprime, descalifica, polariza y ataca la voz de las y los mexicanos”, sentenció el dirigente priista.
El líder local advirtió que la creciente criminalización de la protesta ciudadana es señal de un régimen que, en lugar de construir diálogo, recurre a la fuerza pública para acallar a quienes disienten. “Lo que vimos en la marcha no fue un acto de autoridad, fue un acto de represión, y eso debe ser señalado con toda claridad”, agregó.
Comento que en respaldo a los jóvenes detenidos, el presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, anunció la puesta en marcha de un equipo jurídico especializado que brindará asesoría y acompañamiento gratuito a las familias afectadas. A través de un mensaje en la red social X, Moreno instruyó a la Secretaría Jurídica del PRI nacional a actuar de inmediato, y sumó a los equipos legales de diputadas, diputados, senadoras y senadores del partido a esta tarea.
“El PRI no permitirá que se normalice la represión. Los jóvenes merecen ser escuchados, no perseguidos”, expresó Moreno.
Finalmente, Padilla Sánchez hizo un llamado a que el Congreso de la Unión revise los recientes excesos del Ejecutivo federal, y promueva mecanismos que garanticen el respeto irrestricto a la libertad de expresión y manifestación.