• Nativitas
  • Adolfo Tenahua Ramos
La comunidad del plantel demandó a la SEPE y a la Dirección General del Cobat encabezada por Alonso Trujillo una investigación seria sobre el actuar del director.

Inquietud y molestia se han desatado entre padres de familia y docentes del Colegio de Bachilleres del Estado de Tlaxcala (Cobat) Plantel Teolocholco, quienes acusan a su director, Carlos García Sampedro, de aprovechar su posición dentro del sistema educativo para buscar acomodo político rumbo al próximo proceso electoral.

De acuerdo con las denuncias, García Sampedro habría decidido sumarse al grupo político de Alfonso Sánchez, movimiento que, aseguran, contradice la responsabilidad institucional que debe guardar como funcionario. Los inconformes señalan que, lejos de concentrarse en la administración escolar, el director estaría operando para fortalecer su futuro político.

Poco le interesa la opinión de José Alonso Trujillo Domínguez mejor conocido como El Chómpiras, quien, supuestamente ha pedido dejar aún lado la política lejos del trabajo.

Y es que las tensiones aumentaron luego de que se difundiera que el director buscaría proyectarse hacia la diputación local del Distrito 13, aspiración que ha generado suspicacias debido a que recientemente su esposa, Martha Vanessa, compitió por ese mismo cargo. Para la comunidad escolar, este interés confirma que la prioridad del directivo no está en el plantel, sino en mantenerse vigente en la vida pública del estado.

Padres de familia advirtieron que estas intenciones han comenzado a reflejarse en el ambiente interno del plantel, donde—según dicen—se percibe un manejo orientado a favorecer alianzas políticas más que a atender necesidades educativas.

Los padres y docentes también recuerdan que no es nuevo que García Sampedro esté envuelto en polémica: durante su paso por la presidencia municipal de Nativitas fue señalado por múltiples irregularidades administrativas. Y en su estancia previa en el Cobat 01 Tlaxcala, fue retirado del cargo por bajo desempeño y por presuntamente involucrar a maestros en actividades de carácter político.

“Ya conocemos ese patrón: usar la estructura educativa para avanzar en campañas personales”, comentó un docente inconforme.

Ante esta situación, la comunidad del plantel demandó a la SEPE y a la Dirección General del Cobat encabezada por Alonso Trujillo  una investigación seria sobre el actuar del director, así como medidas que garanticen que la escuela no se utilice con fines electorales.

“Los estudiantes no son moneda de cambio ni parte de un proyecto político. Queremos un director que trabaje para ellos, no para sus aspiraciones”, señalaron padres preocupados.

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