La víctima fue arrojada al fondo del Río Zahuapan a la altura del municipio de Tetlatlahuca, esto luego de que los asaltantes creyeron que lo habían matado tras darle una severa golpiza.
El Gobernador Mena refrendó el compromiso de realizar un esfuerzo presupuestal adicional para invertir recursos económicos en la mejora de la calidad del agua del afluente.