• Apizaco
  • Adolfo Tenahua Ramos
La estrategia del alcalde Javier Rivera ha resultado un fracaso, como torpe también ha sido su administración, ya que desde el primer día que tomó protesta, Apizaco no tiene ni pies ni cabeza.

Pobladores y empresarios de Apizaco temen por su seguridad tras la reciente ola de violencia en la zona. El asesinato de una persona dentro de su camioneta en el centro comercial Chedraui fue el hecho más reciente que ha generado pánico entre la comunidad.

Y es que de acuerdo a los datos, la tarde del sábado 9 noviembre, un masculino fue atacado por disparo de arma de fuego en la zona de estacionamiento de Chedraui, por lo cual falleció a bordo de una camioneta negra. De forma preeliminar se sabe que el masculino respondía en vida al nombre de Fermín N.

Lo anterior demuestra que la estrategia de seguridad implementada por el alcalde Javier Rivera ha sido cuestionada por su efectividad, ya que no ha logrado prevenir los robos y agresiones que han ocurrido en los últimos tiempos.

Los habitantes y dueños de negocios están exigiendo medidas más drásticas para garantizar su seguridad y proteger sus propiedades.

La seguridad ha sido rebasada por el edil que día a día demuestra que su gobierno es reconocido por la impunidad  con la que operan bandas delincuenciales,  quienes el alcalde les habría autorizado trabajar a diestra y siniestra poniendo en riesgo la tranquilidad de las familias.

Su estrategia ha resultado ser un fracaso,  como torpe también ha sido su administración, ya que desde el primer día que tomó protesta, Apizaco no tiene ni pies ni cabeza, lastimando severamente la confianza de los ciudadanos y poniéndolos al servicio de los delincuentes.

Y es que la comunidad sigue sintiendo inseguridad y pide más acciones contundentes para abordar el problema.

Es importante recordar que la percepción de seguridad en Tlaxcala ha sido un tema preocupante. Es hora de tomar medidas contundentes para proteger a la comunidad de Apizaco.

 

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