- Seguridad
La violencia volvió a encender las alarmas en el sur de Tlaxcala este miércoles 30 de julio, cuando dos violentos robos a mano armada dejaron víctimas con crisis nerviosa, unidades robadas y un profundo temor entre los habitantes. En ambos casos, las víctimas fueron levantadas momentáneamente y abandonadas tras el atraco.
El primer hecho ocurrió cerca de las 10:20 de la mañana en la calle Domingo Arenas, en el Barrio de Jesús, San Pablo del Monte, donde una mujer vivió minutos de terror.
De acuerdo con el reporte, un vehículo blanco y dos motocicletas interceptaron a la víctima. Sin darle tiempo de reaccionar, descendieron dos sujetos armados, quienes encañonaron a la mujer y la obligaron a subir a su propio vehículo: un Ford Mustang rojo, modelo 2014, con franjas negras y placas TVW961B.
Los hampones la mantuvieron retenida en la parte trasera del auto mientras huían rumbo a Puebla. En el trayecto, realizaron una detonación de arma de fuego y le advirtieron que no volteara. Minutos después, la dejaron abandonada en un terreno baldío, cerca de la carretera a Canoa, visiblemente alterada y bajo amenaza de muerte.
Apenas dos horas después, la delincuencia volvió a atacar. Ahora fue sobre la carretera Vía Corta Puebla-Chiautempan, a la altura de Papalotla, donde un conductor fue sorprendido por al menos cuatro sujetos armados, que viajaban en dos vehículos.
El hombre fue obligado a detener su marcha, lo encañonaron y lo subieron a su propia camioneta Nissan NP300 blanca, modelo 2022, con placas XE2455A. Ahí mismo, le cubrieron los ojos y lo privaron de la libertad momentáneamente.
El comando lo abandonó horas después cerca del Hospital General de San Pablo del Monte, mientras huía con la unidad en dirección desconocida.
Ambos hechos evidencian el descontrol de la seguridad en esta zona del estado. Hasta el momento, las unidades no han sido localizadas, pero se presume que los delincuentes cruzaron con rumbo al estado de Puebla, donde suelen refugiarse grupos dedicados al robo de vehículos con violencia.