- Tlaxcala
Un viacrucis es el que ha vivido la conocida “peligrosa anciana” que vendía sus “yerbitas” y que fue levantada con un operativo excesivo por parte de la policía de Chiautempan mandada por el alcalde amoroso, Antonio Mendoza Romero, ya que fue despojada de su vivienda por una persona que supuestamente se aprovechó de que no sabe leer y escribir, sin que hasta el momento encuentre apoyo por parte de las autoridades.
A este medio María Gregoria Felix Ocotitla Cuamatzi narró cómo ha sido víctima de vivales y hasta de las mismas autoridades por la edad avanzada que tiene y por no saber leer y escribir, lo que le ha llevado a perder incluso su casa desde hace dos años, sin que ningún nivel de gobierno le ayude o mínimo escuche lo que le sucedió.
La quejosa mencionó que vivió por más de 30 años en concubinato con Gregorio Ausencio Cocoletzi Bautista, con quien en común acuerdo y luego del fruto de un arduo e incansable trabajo adquirieron el bien inmueble denominado le sexta fracción del predio “TEOPANZOL” ubicado en la sección quinta de Contla.
En el año 2012 su pareja falleció y para el 29 de mayo de 2013 al querer ingresar a su domicilio se encontró que había candados que le impedía tener acceso, por lo que desde ese día vive donde le den posada “vivo donde gente bondadosa me apoye y a la buena de Dios, ellos me apoyan en medida de sus posibilidades y yo trató de vender mis yerbitas pero luego ni eso me dejan hacer ese presidente un tal Toño Mendoza que me mando un montón de policías para que me quitaran”.
Ante tal situación la señora decidió en ese entonces acudir con el presidente de comunidad que era José Reyes “quien me dijo de manera amenazadora que me fuera de ahí porque esa ya no era mi casa y que si no me golpearían, por lo que me retire a solicitarle apoyo al presidente municipal de nombre José Rodríguez Muñoz quien jamás y nunca me quiso recibir después de 15 días de espera”.
Fue en ese entonces cuando sucedió la represión de la que fue víctima por parte de Antonio Mendoza Romero, lo que llevó a que su salud se agravara y tuviera que buscar la manera de recuperarla para proseguir en el intento de rescatar su propiedad.
Posteriormente se percató que dentro de las entrañas del juzgado que presidia el Juez José Luis Moctezuma Carvajal se gestaba un juicio de Otorgamiento y Firma de Contrato de Compraventa promovido por Domingo Daniel Cocoletzi Cuamatzi en donde su concubino a través de su representante legal de nombre Paz Cocoletzi y supuestamente ella le vendieron su propiedad.
Y es que la agraviada afirmó que en ningún momento fue notificada de comparecer en tal juicio, por lo que no pudo presentarse, manifestándole el juez que ella había caído en rebeldía al no haberse llegado, quedando en completo estado de indefensión en algo que llamó un presunto contubernio entre los juiciantes.
Es por esto que el día de ayer acudió al Congreso del estado para solicitar su apoyo y así pueda enfrentar las injusticias de las que ha sido víctima producto de su ignorancia y avanzada edad que la tiene en circunstancias de rezago y pobreza extrema, sólo ayudada por gentes que se han compadecido a diferencia de quienes han visto en su vulnerabilidad una ventaja para sacar provecho.