- Apizaco
Apizaco, Tlax; a 5 de febrero de 2016.- Pese al hermetismo de la PGJ, dos de los migrantes agredidos a balazos por personal de Ferrosur, decidieron romper el silencio antes de partir a bordo del tren “La Bestia”, rumbo a la frontera de los Estados Unidos, aseguran que fueron agredidos arteramente la noche del pasado miércoles, por los “garroteros” que cuidan el tren.
DOS MUERTOS Y UN HERIDO
El saldo sería de dos personas muertas, un migrante que estaba en calidad de “desaparecido, pero que por filtraciones en la PGJE se supo que luego de ser buscado con helicópteros y elementos pie tierra en la zona de Buenavista, finalmente fue localizado sin vida.
La información que se tiene es la de que se trata de Carlos Roberto Aquino, de origen guatemalteco y a quien según sus compañeros de viaje, doce en total, lo habrían ultimado a balazos.
Dentro de esta información que se encuentra oculta a la opinión pública, el occiso habría recibido un balazo a la altura del pecho, pero esta noticia debe ser confirmada por la PGJE, en su momento.
La otra persona fallecida es Edgar Macías Guarneros y habitante de la región y de origen tlaxcalteca, quien fue identificado por sus familiares y que trabajaba como vigilante de una empresa privada del Estado de México al servicio de Ferrosur.
Durante el enfrentamiento, también resultó lesionado en un pie el guatemalteco, Cristian Alexis Baños, de 19 años de edad y que luego de ser internado en el hospital de zona en Tlaxcala y al parecer este viernes sería dado de alta.
Entumecidos por el intenso frío que se dejó sentir en las primeras horas de este viernes en el albergue para migrantes “La Sagrada Familia”, alrededor de 30 migrantes se preparaban para la jornada, esperan a La Bestia y partir rumbo a su sueño americano.
Somnolientos, con cepillo de dientes en mano, se forman frente a ese contenedor naranja que en su interior guarda medicinas, para que reciban su dotación de pasta de dientes y con una bandeja pasar a los baños.
Otros se calientan con los primeros rayos del sol, que poco calienta en este región de Apizaco, donde el viento sopla inclemente y hace que la sensación térmica sea más baja.
LA TERRIBLE EXPERIENCIA
De entre el grupo, dos guatemaltecos decidieron acercarse a los reporteros de Ágora Plural y Pincel de Luz, para iniciar una conversación con mucha desconfianza, con el miedo reflejado en sus morenos rostros.
Se identificaron como Dagoberto N. y José Roberto N., ambos ciudadanos de origen guatemalteco y aseguran que ellos formaban parte del grupo que fue agredido por los “garroteros” de Ferrosur.
¿Ya se van ahorita o cuando puedan?
Migrantes.- Ahorita, por lo peligroso que esta, mis compañeros se fueron ayer
¿Cuántos venían?
Migrantes.- Andamos 12, pero se ha perdido uno y el baleado hemos quedado 10
¿Qué fue lo que paso?
Migrantes.- El miércoles estábamos comiendo como a las nueve de la noche, estábamos terminando de comer cuando venía el tren, nosotros lo estábamos esperando para subirnos cuando vimos dos carros de patrulla que venían cuidando el tren.-
Entonces les dijimos a los compañeros no hay que subirnos, porque vienen cuidando el tren y nos pueden bajar.
Pero cuando el tren ya iba llegando, venían dos garroteros y cuando iban bajando la lámpara nos enfocaron y nos dijeron no se vayan a subir porque si se suben los vamos a “verguiar”.
Porque si se suben, los vamos a “verguiar” y los bajamos.
Iban armados los de arriba, en eso venían dos carros de patrulla que se habían quedado parqueados allá porque supuestamente venían custodiando el tren.
Entonces cuando nosotros nos dicen así y vemos el carro patrulla decidimos no montarnos, nos quedamos ahí, entonces paso el tren y se medió detuvo y el tren siguió su camino.
Pero de atrás del tren se bajaron dos garroteros de negro, encapuchados, armados y vimos que venían avanzando, de 6 a 7 personas, entonces nos dio miedo, porque nosotros no venimos armados.
Nosotros solo venimos acá porque queremos pasar humildemente y ellos siguieron avanzando y de repente sonó el primer disparo ahí en el cuartito donde nosotros estábamos y no le dimos importancia porque supuestamente ellos usaban silenciador.
No se oían los bombazos solo se oía pin, ya para el segundo disparo un compañero dijo corramos porque son balas de verdad, porque la bala no se oía el impacto, solo el zumbido porque traían silenciador.
Cuando nosotros comenzamos a correr es donde nos bañaron a todos con las armas, gracias a Dios no hubo más muertos.
Corrimos y un compañero, Cristian Alexis Bañoz, dijo huy me pegaron, esto pasó cuando íbamos corriendo, nosotros no pudimos auxiliarlo, porque nos estaban disparando y del miedo unos agarramos para un lado y otros por otro lado.
Entonces el compañero quedo tirado porque nosotros no pudimos auxiliarlo en ese momento. Uno de los compañeros que iba a la par de él, le dijo córrele, córrele y le dice no vete tu déjame a mi aquí tirado.
Entonces el compañero se fue y lo dejo ahí tirado y cuenta que se fue a una zanja y se tiró zacate encima, y en lo que estaba ahí lo estaban buscando a todos ver a quien encontraban y lo que el escuchaba es que al que encontraran lo iban a matar.
Luego como no encontraron a nadie, luego se fueron las dos patrullas.
¿Cuáles son sus nombres?
Migrantes.- Dagoberto y José Roberto.
¿De ahí se reporta a un guardia de Ferro sur muerto?
Migrantes.- De ese problema nosotros sinceramente desconocemos, porque nosotros solo conocemos el hecho donde nosotros fuimos baleados, lo que paso más adelante sinceramente no sabemos.
Pero, ¿fue ahí mismo en la zona?
Migrantes.- Supuestamente fue más adelante en una estación que no conocemos nosotros, nosotros nos quedamos al otro lado de la vía con maíz seco, porque estábamos esperando que vinieran a recoger al compañero.
¿Ustedes saben cómo se llama a donde paso eso?
Migrantes.- No, no sabemos cómo se llama el pueblito ahí.
¿Es la Magdalena?
Migrantes.- Me parece que la Magdalena es la que está enfrente
¿A ustedes los interrogo la policía?
Migrantes.- Si, nosotros hicimos la denuncia luego luego, y se han portado muy bien con nosotros, nos han dado comida y agua.
¿Para concluir, ustedes están denunciando agresión por parte de los garroteros de Ferro sur?
Migrantes.- Sí, a nosotros nos balearon, tenemos al compañero que está herido y hay un desaparecido.
¿Cómo se llama el desaparecido?
Migrantes.- Es Carlos Roberto Aquino
¿El viene de Guatemala?
Migrantes.- Si, el viene en el mismo grupo
¿Y no ha aparecido?
Migrantes.- No
¿Cómo es el?
Migrantes.- Él es algo blanco, usa bigote y tiene una mancha negra del lado derecho, color de ojos negros, cabello negro, 1.60 de estatura, de 29 años d edad, nos contaba que tiene hijos en Guatemala.
¿Ustedes sabían que había agresión por parte de los garroteros de antes?
Migrantes.- No, no sabíamos hasta que la gente nos contó en el pueblito que han matado a muchos migrantes, más de Honduras, los han tirado del tren y también con las armas.
¿Entonces ellos llegaron con las armas y comenzaron a tirarles a ustedes?
Migrantes.- Si
¿Y del muerto ustedes no saben?
Migrantes.- No, nosotros nos quedamos al otro lado de la vía y esperamos a que amaneciera para para regresar a donde nos pasó el problema y cuando estábamos en el cruce fue cuando llego la policía y vimos que tomaron fotos y recogieron las capsulas entonces, ellos llegaron al puentecito donde estábamos nosotros.
¿Y no les preguntaron por el muerto de Ferro sur?
Migrantes.- No, nada.
¿Y cómo los trataron las autoridades?
Migrantes.- Bien, nos trataron bien… el albergue está bien,
LAS AUTORIDADES NO HACEN NADA: SACERDOTE
El sacerdote y párroco de la iglesia católica de “Cristo Rey”, Elías Dávila Espinoza, reconoció que hay un ambiente de tensión que podría generar una ola de violencia en contra de los migrantes centroamericanos.
Pero que esta situación se vive a lo largo de las vías del ferrocarril, luego de la muerte de un vigilante de la empresa Ferrosur en el municipio de Tlaxco, dijo el también responsable del albergue “La Sagrada Familia”,
Tras los hechos violentos solicitó la intervención inmediata de las autoridades para atender el caso e impulsar políticas públicas que impidan a la propia empresa tomar represalias contra todos los migrantes que viajan en el tren.
En entrevista colectiva, mencionó que en la zona limítrofe entre Puebla y Tlaxcala es donde comienzan los ataques de personal de Ferrosur contra los viajantes, incluso por parte de autoridades municipales, pero así a lo largo de la vía pasando por Apizaco y Tlaxco.
Lo anterior, advirtió, ha desatado un clima de tensión para los indocumentados provenientes de Centroamérica, ya que según los testimonios, son intimidados, les roban, golpean, son amenazados, e incluso les quitan la vida.
Es por ello que también la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) tome cartas en el asunto, a efecto de buscar que la empresa ferroviaria acepte que se les dé capacitación en la materia a los vigilantes, pues en la medida que ellos abusen de los “sin papeles” se genera más violencia.
“Yo pienso que deben de tomar medias la empresa ella es la que lleva sus custodios y ellos se deben de capacitar para tratar a los migrantes, que tenga el perfil se les respete y no se les maltrate”, apuntó.
INVESTIGA PGJE MUERTE DE ELEMENTO DE SEGURIDAD DE FERROSUR
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) a través de la trilogía investigadora, inició las pesquisas correspondientes por la muerte de un elemento de seguridad de la empresa concesionaria Ferrosur en el municipio de Tlaxco, con el objetivo de conocer el móvil de los hechos y dar con el paradero del o los probables responsables, ya que fue encontrado con diferentes contusiones en el cuerpo.
El Agente del Ministerio Público, oficiales de la Policía de Investigación y peritos, fueron informados la madrugada del 3 de febrero, de la existencia de un cuerpo sin vida sobre las vías del ferrocarril, específicamente en la localidad de La Magdalena Soltepec, perteneciente al municipio de Tlaxco.
Con esta información, los especialistas de la PGJE acudieron a realizar las diligencias correspondientes del levantamiento del cadáver y ordenaron su traslado al Servicio Médico Forense (Semefo) anexo a la Subjefatura del Departamento de Investigación del Delito zona Norte, con sede en Apizaco.
Ahí, se le practicó la necropsia de ley, la cual arrojó como causa de muerte choque traumático secundario a traumatismo craneoencefálico por contusión directa; asimismo, familiares acudieron ente el fiscal y reconocieron el cuerpo de quien en vida respondió al nombre de Edgar Macías Guarneros, custodio de la empresa Ferrosur y que al morir contaba con 28 años de edad.
Momentos más tarde, el Representante Social fue informado por especialistas del hospital comunitario del municipio de Tlaxco, del ingreso de una persona del sexo masculino indocumentado, con una herida en el pie provocada por un disparo de arma de fuego.
Al contar con esta información, el grupo de expertos se trasladaron de inmediato al nosocomio en mención, donde recabaron la declaración del agraviado, quien dijo llamarse Cristian Alexis Baños Mesquite, de 19 años de edad y de nacionalidad salvadoreña.
Con estos hechos, la trilogía investigadora desahoga diferentes diligencias y pruebas científicas, con el propósito de conocer la forma cronológica de cómo ocurrieron los hechos y la relación que podría existir entre ambos acontecimientos.
De esta forma y en espera de las noticias oficiales de las autoridades de la PGJE, los dos migrantes emprendieron su viaje, con un amargo sabor de boca, y tristes, muy tristes por no saber el paradero de su paisano.. dijeron que se van con la pena de no saber nada de su amigo.