- Tlaxcala
En Tlaxcala nada conmueve el corazón de la llamada “Dama de Hierro”, como es conocida popularmente la procuradora general de justicia del estado, Alicia Fragoso Sánchez, nadie la convence para ampliar su horario de servicio o contratar a más personal.
Todo esto ocurre desde hace más de una semana, al exigir el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones la carta de antecedentes no penales a los ciudadanos que pretenden una candidatura para alcaldes y presidentes de comunidad.
En este caso se sumaron los candidatos a diputados y a gobernador de los diez partidos que contienden para la elección del próximo 5 de junio, en total en esta comalada son más de 500.
Pero el grueso de los candidatos a presidencias suma más de 16 mil, lo que indica que se deben de expedir más de 17 mil cartas de antecedentes no penales, pero este caos tiene dos razones.
La primera es que a todas luces el personal que recaba los datos es insuficiente, si se toma en cuenta que la PGJE se apoya con estudiantes de la licenciatura en derecho, no reciben salario, tienen que regresar a sus escuelas.
La segunda es el horario, la atención es de nueve de la mañana a dos de la tarde, este martes se amplió una hora, pero eso es insuficiente a decir de los que esperan hasta tres días para obtener su documento.
Entre café, charlas, jugadas de baraja, y uno que otro cigarrilo y hasta un tequilita para calentar el cuerpo, diariamente cientos de tlaxcaltecas duermen en el suelo, a la intemperie.
Se identifican vienen de puntos remotos, lo mismo de San Pablo del Monte, de Huamantla, Tequexquitla, Tlaxco, Calpulalpan o Nanacamilpa, no hay que olvidar que son 60 municipios y alrededor de 400 comunidades.
Si a estos espacios, se suman el número de partidos políticos, tenemos por eso la suma de más de 17 mil ciudadanos en espera de su carta, pero no hay que olvidar que también las piden en los trabajos y en escuelas.
Entre cigarro y bromas, la gente no sabe que hacer, en espera de que den las seis de la mañana, y un tramo más de tres horas para que abran las oficinas, hacen cuentas y saben que la PGJE y el gobierno se van aganar algo así como 1,4 millones, por la simple expedición del documento.
Comentan que “hay pájaros de cuenta” que han caído en las redes de la justicia, al querer obtener su documento, los ubican en la base de datos y si la deben, la tienen que pagar”.
En el aire se destaca el aromático café, en la tertulia, la mayoría de hombres que se quedan a velar, por lo duro del suelo prefieren que el cansancio los obligue a dormir en sus camas de cartón y cobertores.
Ahí comentan que ya se organizaron, se niegan a dar sus nombres – no sea la de malas-, “vamos a repartir entre nosotros nuestras propias fichas, para evitar que se metan los abusivos”.
Otros esperan que llegue la familia con los 400 pesos que dicen deben dar de “cuota”, para pasar la aduana y evitar la enorme fila que no tiene para cuando acabar, otros se van a decir priistas, para veri si la pegan y les abren la puerta.
En algo coincidieron y como la mayoría son “políticos”, esperan la hora en que algún o alguna candidata tomen la bandera de su defensa “para ver si en verdad tienen voluntad de servirle al pueblo”.
“Pero es la hora en que ninguno de los coordinadores, ni nadie que está en las campañas se les ha a acercado, solo un visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, que al igual que los de la procu, nada hacen por solucionar este problema.
Resignados poco a poco sucumben al sueño, se preparan para otra jornada,, con la esperanza de que algo conmueva a la “Dama de Hierro”, para que se gaste algo de lo que va a ganar, para que contrate más personal o para que ponga a sus policías investigadores a ayudar…para que hagan algo.