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Por la torrencial lluvia que azotó a la entidad la tarde noche de este viernes, el estadio Tlahuicole evidenció el pésimo sistema de drenaje con el que cuenta, además del obsoleto equipo con el que trabajan los bomberos, por lo que el partido fue suspendido para disputarse este sábado al mediodía.
Esto, ya que el estadio se inundó casi en su totalidad, lo que evitó que el partido que estaba programado para este viernes a las 19:00 horas, entre los Coyotes de Tlaxcala y su similar de Inter Playa del Carmen, se suspendiera, ya que los tragafuegos intentaron vacíar la cancha sin éxito alguno.
Y es que los bomberos utilizaron un camión con una manguera que no le permitió vaciar la cancha para que el partido se pudiera llevar a cabo, lo que evidenció que la actual administración que encabeza el gobernador saliente Mariano González Zarur, no ha invertido en materia de prevención y atención a desastres provocados por la naturaleza.
De hecho, los asistentes repudiaron que el partido se hubiera suspendido por la falta de mantenimiento al inmueble, que el Gobierno del Estado le debería dar para que los partidos se puedan llevar a cabo, aún cuando llueva.
El juego se llevará a cabo en punto de las 12:00 horas de este sábado, y como medida de ‘consuelo’ anunciaron que será totalmente gratuito, pero los cientos de asistentes que se dieron cita la noche de este viernes, sí pagaron un boleto y soportaron la lluvia, para que al final lo suspendieran.
Incluso, entre los asistentes hubo quejas, ya que el personal del estado, cobra taquilla incluso a menores de tres años de edad, lo que causó indignación.