- Política
La polaridad política actual podría generar que el próximo presidente de la República sea electo por apenas el 26 por ciento de los electores mexicanos, lo cual pondría en riesgo su legitimidad, advirtió el presidente del Consejo Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Ángel Ávila Romero.
Frente a ese panorama, insistió en que los distintos partidos políticos con apoyo de sectores de la sociedad civil deben hacer esfuerzos por conformar el Frente Amplio Democrático para fomentar la participación ciudadana en la toma de decisiones electorales y así legitimar a un nuevo régimen gobernante, distinto al agotado hoy representado por Enrique Peña Nieto.
En conferencia de prensa este sábado, Ávila Romero consideró que un presidente de México y el Poder Legislativo en su conjunto con una nueva mayoría, debe ser electo con por lo menos el 48 por ciento de los electores mexicanos en los comicios de 2018, de otra manera las diferencias con el pueblo continuarán.
Este día, la corriente Nueva Izquierda en Tlaxcala organizó el foro Gobierno de Coalición, como parte de las acciones de promoción del Frente Amplio.
Antes de ese evento, la dirigencia estatal perredista organizó una rueda de prensa en la que Ángel Ávila alertó que si no se hace algo distinto la legitimación presidencial está en juego, pues ningún partido político por sí solo podría siquiera alcanzar el 26 por ciento de votación, por eso una coalición que represente a las minorías sería la clave para combatir la corrupción y fortalezca la transparencia.
Por lo pronto, aseguró que la conformación del Frente Amplio avanza por buen camino y de cara a la designación de candidaturas, las ciudadanas son una amplia posibilidad, pero todo debe hacerse mediante métodos democráticos.
Finalmente, el dirigente estatal del PRD, Manuel Cambrón Soria, subrayó que el Frente Amplio no trata de excluir a nadie, sino de construir un régimen de gobierno común que beneficie a todos los ciudadanos en general.