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Firme en el discurso de que no intervino en el proceso electoral, el gobernador priista Mariano González Zarur aceptó la derrota de su partido en las principales alcaldías de la entidad, incluida la de Tlaxcala capital y Apizaco.
"La alternancia ya se dio en Tlaxcala, somos los campeones de la alternancia…ahora que no se había perdido la capital, pues en alguna ocasión se iba a perder, ahora se perdió por muchas razones", expresó en conferencia de prensa.
De los 60 Ayuntamientos renovados el pasado domingo, el PRI ganó 16 y perdió los municipios de mayor importancia en la entidad, como Tlaxcala, Apizaco, Huamantla, Calpulalpan, San Pablo del Monte, Chiautempan y Zacatelco.
Mientras que de las 19 diputaciones de mayoría relativa que estuvieron en juego, el partido tricolor logró con sus candidatos, el triunfo en 11 distritos.
"El PRI se alza con 11 distritos que no son nada despreciables, el 60 por ciento de los distritos, entonces hay que ver lo positivo, no lo negativo, y el PRI se consolida como primera fuerza electoral en las últimas tres elecciones", remarcó.
Con esos resultados electorales, el Mandatario local se dio por satisfecho, porque fue la sociedad la que votó, según él, sin ninguna inducción de gobernantes.
"Están sorprendidos mis hijos, están sorprendidos los funcionarios de que llegué a la oficina, empecé a trabajar, a revisar cosas, a dar instrucciones. La vida sigue, yo no estoy de luto, estoy feliz y contento de ser gobernador, yo no estuve en la boleta y siempre que he estado en las boletas he ganado", acentuó.
Calificó las votaciones del pasado domingo como una jornada ejemplar como pocas veces en Tlaxcala, principalmente porque "después de varios años en que se notaba la participación del Gobierno en turno, ahora no".
González Zarur insistió en que fue la sociedad la que eligió y definió los resultados con su voto, y si hay una equivocación, serán los mismos ciudadanos los que tendrán que asumirlo.
"Yo no metí las manos en la elección, ni en la elección del año pasado y muchos pensaban que iba yo a tener problemas con el presidente Peña, no porque yo soy muy claro y yo sabía que en Tlaxcala sigue roto el tejido social", indicó.
En este sentido, explicó que en la derrota del PRI en los principales municipios tlaxcaltecas, así como en el triunfo de otras fuerzas políticas, incluyeron diferentes factores, desde un posible mal gobierno en las comunas, hasta un buen candidato que supo lograr acuerdos, sumatorias y que salió a tocar la puerta.
Pero lo importante, aludió, era ganar las diputaciones locales porque es el Poder Legislativo desde donde se da la gobernabilidad.
"En las administraciones municipales yo lo demostré en estos dos años y medio (de Gobierno) que he tenido sumatoria, a la mejor eso ayudó a que algunos pudieran trabajar a favor de su partido", acotó.