• Gobierno
  • Gerardo Santillán
Por el deterioro que presenta y evitar sea un riesgo para la población.

El director del Instituto Estatal de Protección Civil (IEPC), Mateo Morales Báez, no descartó que dentro del procedimiento jurídico por el caso de la Plaza Bicentenario, su personal tenga que realizar una nueva revisión del inmueble para constatar el estado físico en que se encuentra y determinar si es necesario acordonarlo por representar un riesgo para la población.

El inmueble, que estuvo en disputa por más de dos años entre el Gobierno del Estado y la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT), presenta a simple vista una enorme deterioro y ha sido utilizado no solo para hacer grafitis, sino para tirar basura y como refugio para indigentes.

En breve entrevista telefónica, Morales Báez recalcó que todo el procedimiento legal sobre la Plaza Bicentenario ha sido llevado por la Consejería Jurídica del gobierno estatal, y que el IEPC solo procedió en fechas pasadas al retiro de los sellos de clausura como fue el fallo judicial, tras su notificación.

Dijo que en ese momento no fue necesario – porque no fue ordenado – realizar una inspección física del lugar, pero abrió la posibilidad de que en próximos días eso se tenga que llevar a cabo por el desgaste que presenta y prevenir riesgos para la población circundante, en primera instancia, así como la de flujo diario.

“El Gobierno del Estado es el dueño de la plaza y la seguridad le corresponde también. Probablemente sí dentro del procedimiento le hagamos una nueva revisión”, mencionó el funcionario.

Luego de un largo litigio entre las partes, el Juzgado Segundo de lo Civil del Distrito Judicial de Hidalgo fue quien notificó a la UAT del exhortó 109/2013 extendido por la justifica federal, en torno a la terminación anticipada del contrato de comodato de la Plaza Bicentenario de Tlaxcala que estaba a favor de la UAT, por lo que el inmueble debía ser restituido.

En los primeros meses de la administración estatal de Mariano González, la obra inconclusa por el gobierno de Héctor Ortiz, fue suspendida al encontrársele severas anomalías arquitectónicas. Su costo fue calculado en alrededor de 400 millones de pesos.

 

Tags: