- Tlaxcala
Un caos se volvió en la capital del estado, principalmente en el primer cuadro de la ciudad y la entrada del “Trebol”, así como calles cercanas a la ciudad, en donde el tráfico de vehículos aumento considerablemente en las horas “pico” por la necesidad de la ciudadanía de acudir a sus centros laborales y a las escuelas.
La tradicional “bajada” de la Virgen de Ocotlán ocurre cada tercer lunes de mayo, en donde la imagen de la emblemática Patrona es venerada y paseada por diferentes puntos de las calles de la ciudad, para realizar un recorrido de alrededor de cinco kilómetros en donde es acompañada por una nutrida procesión de alrededor de mil personas.
Quienes llevan a cargo el paseo de la Virgen por la ciudad son los denominados “Caballeros de la Virgen” quienes con anterioridad deben de cumplir con ciertos requisitos para tener el honor de ser quienes lleven en sus hombros a la dueña de la basílica de Ocotlán.
Las calles como cada año fueron adornadas por alfombras de aserrín de diversos colores sobre las cuales esperan pase la Virgen de Ocotlán, las festividades inician a las 00:00 horas y la señora de la basílica vista los diferentes templos en la ciudad, en donde se incluye además de la procesión ceremonias litúrgicas.
Ante esta tradicional festividad, tanto elementos de vialidad municipal como estatal y preventivos implementaron un operativo especial con el objetivo de agilizar el tránsito de los vehículos y evitar el congestionamiento en las transitadas y de por sí difíciles arterias viales de la capital del estado.
Las festividades culminan con el arribo a la basílica de Ocotlán, en donde se llevan a cabo celebraciones litúrgicas que atraen a visitantes de otras partes del estado y otras entidades, además de los oriundos del lugar que tienen esta tradición como una de las principales en la capital de Tlaxcala.