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El proceso de renovación de la dirigencia estatal del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) “fue un cochinero”, pues la dirigencia nacional lo manipuló para favorecer el regreso de Blanca Águila Lima a la Secretaría General de la sección XXVII, que ya encabezó en dos periodos antes de ser alcaldesa de Zacatelco en el trienio pasado.
Así lo manifestaron en conferencia de prensa Leticia Cervantes Rosales, María del Carmen Pérez Valdés y Sonia Cedeño Flores, quienes pretendieron registrar planillas para participar en la elección interna pero los representantes de la Comisión de Elecciones del Comité Ejecutivo Nacional del SNTSA se los impidió con argumentos de extemporaneidad y falta de requisitos, por lo que solo la fórmula de Águila Lima lo logró.
Aunque reconocieron que al no haber quedado inscritas en el proceso las deja sin personalidad jurídica para impugnar los actos, sí enviaron una inconformidad a la secretaria de Organización para los Estados Zona Centro y representante del CEN, Silvia Rivera Hernández, además de exhibir públicamente que el trámite estuvo amañado desde el pre registro de candidatas y candidatos.
Señalaron que no se respetó el horario de 9:00 a 12:00 horas para la inscripción del pasado 29 de mayo y deliberadamente al personal encargado de la recepción y revisión de documentos dio largas las planillas opositoras a la Blanca, además de que cambió el orden, por lo que solicitaron a la Comisión Nacional de vigilancia haya una sanción.
También se refirieron al hecho de que seis meses antes de este proceso interno, Blanca Águila disfrutó de dos licencias sin goce de sueldo cuando se desempeñó como presidenta municipal de Zacatelco, cuando las bases de la convocatoria señalaban una situación de esa naturaleza como impedimento para que no procediera el registro.
Asimismo, en relación “a lo previsto en el artículo 7 del Reglamento de Procedimientos Electorales de SNTSA, los cargos de confianza de acuerdo a su ámbito de aplicación que a continuación se describen independientemente del código que ostenten tampoco podrán votar ni ser votado (…)” y en virtud de que Águila Lima se desempeñaba como jefa de enfermería de la SESA no procedía tampoco su registro.
Por ello, las inconformes demandaron al CEN negar el registro oficial a la Planilla Blanca, ordenar la resposición del pre registro de planillas por vulneración a derechos humanos y al estatuto sindical, así como garantizar la observación de la convocatoria, la legalidad estatutaria y la participación legal, justa y con equidad en el proceso electoral interno como filiados del Sindicato.