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La posibilidad de que el proyecto deportivo Coyotes de Tlaxcala de la Segunda División Premier Profesional del fútbol mexicano se consolide y sea un negocio rentable son nulas, consideró el exábitro internacional Arturo Brizio Carter.
El también comentarista de televisión, fue entrevistado por e consulta en el aeropuerto de Guadalajara, donde externó que plausible que se fomente la creación de más equipos profesionales en provincia; sin embargo, aclaró que en México los únicos clubes que dejan dividendos por la formación de los jugadores son Chivas y Pachuca.
A mediados de agosto, los grupos empresariales Pachuca y Providencia, junto con el Gobierno del Estado, dieron a conocer la adquisición de una franquicia de segunda división que fue nombrada Coyotes de Tlaxcala y que a partir de este torneo jugará en el Estadio Tlahuicole de esta capital.
La inversión, según se confirmó en ese momento, fue de 15 millones de pesos de los cuales cinco fueron aportados por el Gobierno de Mariano González Zarur, otra cantidad similar por parte del empresario textilero Rafae Torre Mendoza, y el resto por parte del Grupo Pachuca.
A pregunta expresa sobre si por la cercanía de Tlaxcala con Puebla era inviable un equipo de segunda división, Brizió contestó:
"Cualquier manifestación deportiva bienvenida, todo mundo quiere tener un equipo de fúrtbol, pero esos equipos son un barril sin fondo porque no hay forma de que sean negocio, sólo Pachuca y Chivas por la venta de jugadores, pero que padre que tengan su equipo en Tlaxcala, pero (por estar cerca de Puebla que tiene club de Liga MX) no creo que tenga ningún futuro, con toda honestidad".
Y es que en el caso de Coyotes FC, entre sus pricipales promotores no sólo se encuentra el poderoso Grupo Providencia, sino que se especula que Mariano González Aguirre, hijo del mandatario estatal, tendría alguna participación económica en el equipo.