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A una semana de que la diputada priista Cecilia Sampedro Minor, llamó a sus compañeros en aportar artículos para los damnificados de los Cabos Baja California Sur, y a pesar de que existe un centro de acopio de víveres en la sede del Poder Legislativo, el llamado a la solidaridad no tuvo eco entre los Legisladores.
Cabe recordar que la priista usó la tribuna para solicitar; “a los compañeros diputados y a los gobernantes, para que nos solidaricemos con nuestros hermanos de los Cabos Baja California Sur…propongo llevar a cabo acopio de víveres que serán enviados por medio del sistema DIF”.
Lamentablemente, los escasos artículos que se encuentran en la mesa receptora en el acceso principal al Congreso local, no alcanzarían a mitigar las necesidades por lo menos de unas cinco familias de damnificados.
En una lona, se especifica los insumos que se requieren como; atún, sardina, arroz, frijol, azúcar, café, sopa de pasta, lentejas, verduras enlatadas, mayonesa, aceite, galletas, chocolate y leche en polvo.
Además, de artículos de limpieza, como; jabón, cubetas, cepillos, franelas, jaladores, escobas, jergas, pinol, así como artículos de higiene personal, entre ellos; pañales desechables, papel sanitario, toallas femeninas, cepillos y pastas dentales, shampo, jabón de tocador y rastrillos.
No obstante de que los representantes populares perciben honerosos salarios, la solidaridad no es lo suyo y apoyar a los hermanos mexicanos en desgracia en el norte del país, tras las afectaciones climatológicas, que ni esas movieron el corazón de los diputados.
En contraste, la mayoría de diputados están más ocupados en llevar agua a su molino, así como ocupar los principales encabezados de los medios de comunicación por estar inmersos en aparentes actos de corrupción y buscar el protagonismo de manera recurrente que en desprenderse de por lo menos de un día de salario para apoyar a la población.
Sin embargo, no es la primera ocasión que se ha evidenciado la falta de sensibilidad de los diputados, ya que en otras ocasiones que pequeños empresarios han ofertado sus productos en el Congreso local, no han tenido el apoyo esperado.
Incluso han sido calificados de “codoletes” ya que sus percepciones superan los 30 mil pesos mensuales, sin incluir ingresos adicionales que como Legisladores disfrutan.
Por lo anterior, se espera que en los próximos días puedan aportar su granito de arena con artículos que mitiguen en parte las necesidades de nuestros hermanos en desgracia ya que la fecha vence este tres de octubre para aportar las donaciones respectivas.