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Derivado de la presión psicológica que ejercieron docentes de la escuela primaria Nicolás Bravo ubicada en la comunidad de Xaxala, le provocaron parálisis facial a una menor quien podría sufrir un derrame cerebral por el hostigamiento, luego de que sus padres no aportaron las cooperaciones forzosas que fueron impuestas por el director.
Al respecto Alejandra Barragán, madre de la menor afectada puntualizó que su pequeña hija podría ver afectada su salud gravemente debido a que el problema neurológico podría derivar en un derrame cerebral por la presión que ejercen los maestros en su contra.
En ese sentido, acusó a la maestra de nombre “Lourdes” quien en el ciclo pasado fue la orquestadora de presionar a los alumnos, por órdenes del director Dario Sampedro Vázquez, de ser la que de manera permanente hostiga a la menor de edad.
Agregó además, que existen actos que violatorios a sus Derechos Humanos por algunos docentes, como el maestro de educación física Jorge Hugo Cervantes, quien discrimina a la menor, por no haberle comprado el uniforme que el comercializa en la institución.
“De continuar con esta presión contra mi hija podría hacerla recaer incluso podría provocársele un derrame cerebral, este es el diagnóstico médico que está asentado en su expediente en el seguro popular y hago responsable a la profesora de lo que le pueda pasar”, sostuvo la madre inconforme.
Además, el escrito que le fue dirigido al presidente de la Sociedad de Padres de Familia Carlos Meneses Solís, urgió su pronta intervención ya que además le ha sido retenida la boleta de calificaciones hasta que no pague las cooperaciones que fueron impuestas sin previo consenso.
No obstante de lo anterior, y a pesar de que las autoridades de la Secretaría de Educación Pública del Estado (SEPE) y la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET), tienen conocimiento de esa problemática, han optado por hacerse de la vista gorda en lugar de sancionar al directivo y a los docentes.
Por si fuera poco, y luego de que en días pasados padres de familia cerraron la institución educativa en demanda de que sea destituido el director por los actos de corrupción, empero, las mismas han optado por cobijar al directivo por lo que se presume contubernio entre las partes involucradas.