- Tlaxcala
El DIF estatal ha dejado claro que lo menos que le importa es cumplir con la nutrición de los niños tlaxcaltecas, cuando de negocios se trata, vulnerando los objetivos y las mismas reglas de operación de esta institución que están dentro de su marco normativo, para cumplir con el compromiso social para su adecuado crecimiento y rendimiento escolar de los niños de preescolar y de los tres primeros años de primaria.
Anteriormente se señalaron mediante este medio de comunicación las corruptelas que indicaron Padres de Familia debido a que la leche no se entrega completa, al igual que las barras de amaranto y los empaques de cacahuates con frutas deshidratadas y las frutas frescas en mal estado.
Una de las principales reglas de operación dice que la entrega a los beneficiarios debe ser diaria dentro de la institución educativa 15 minutos antes de empezar las clases o 15 minutos antes de salir al recreo, algo que manifiestan los Padres de Familia no se cumple ya que en ocasiones dejan de proporcionarles el beneficio y llegan a juntárselo por dos o más días.
A colación de lo antes mencionado, incumplen nuevamente con las reglas de operación, ya que una de éstas, establece que queda prohibido entregar las 5 raciones de la semana juntas o vendérselas a grupos no beneficiados.
Es por esto que al vulnerar algunas reglas de operación y entregar menos producto del que se debe de ofrecer, el DIF estatal incumple con el objetivo que plantea dentro de su plan de acción, que es “proveer temporalmente una ración alimenticia a la dieta de la población escolar sujeta de atención, mediante la entrega de desayunos fríos a menores que cursa el nivel preescolar y de primero a tercer grado de primaria, con el fin de contribuir a su adecuado crecimiento y rendimiento escolar”.
Irregularidades que corresponden tan sólo en nueve meses del ciclo escolar 2012- 2013 y que del pasado y actual ciclo no se tiene mayor información debido a la opacidad en la que se desenvuelve una de las piezas clave del marianismo y que tiene menor desgaste entre el tejido social roto.