- Política
De no haber oposición del resto de tribus perredistas, la senadora Lorena Cuéllar Cisneros estimó solicitar licencia al cargo en el transcurso del mes de febrero de 2016 para contender por la gubernatura de Tlaxcala en los comicios locales de ese año, como abanderados del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
El domingo, ocho corrientes políticas manifestaron su respaldo al proyecto de la legisladora federal en pos del Gobierno del Estado, entre ellas Frente de Izquierda Progresista, Izquierda Democrática Nacional, Mejores Cuentas, Nueva Izquierda, Foro Nuevo Sol, Red Joven, Unión Democrática Nacional y Unidad Nacional de las Izquierdas.
Ahí, Cuéllar Cisneros reconoció el esfuerzo de voluntad, unidad y madurez política de apoyar sus aspiraciones, convirtiéndose en la primera política que públicamente es impulsada para relevar al priista Mariano González al frente del Ejecutivo del Estado. Del resto de partidos se conocen aspirantes, pero no ha habido formalidad pública de impulso.
La senadora y exmilitante del PRI, dijo que ve un PRD más fortalecido que nunca y que el 2016 será su momento, pues recordó que en las elecciones federales intermedias del pasado 7 de junio apenas salió a emitir su sufragio el 31 por ciento de los potenciales votantes, cuando lo normal en elecciones locales es del 61 por ciento, así que las condiciones en la siguiente contienda serán diferentes y con amplias posibilidades de que la izquierda se alce con el triunfo.
Sin embargo, un grupo de perredistas representantes de corrientes como ADN, IDN, NI y Foro Nuevo Sol, cuestionaron la supuesta candidatura de Cuéllar Cisneros. Gente como Gelacio Montiel, Cristóbal Luna, Alejandro Martínez y Ubaldo Lander, señalaron que las cosas no están definidas y que incluso se trató de un anuncio desesperado e irresponsable.