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La fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática (PRD) se habrá de quedar con las ganas de presidir la Mesa Directiva en el segundo periodo de sesiones debido a que incumplió acuerdos con otras fracciones y además no cuenta con la votación necesaria para tener ese órgano directivo.
A pesar de que al sol azteca le tocaría presidir la representación legal del Congreso local en el segundo año de la actual Legislatura luego de que así fue el acuerdo inicial y luego de que el coordinador perredista Salvador Méndez ya lo anunció, trascendió que no le será cedido ese espacio.
En consecuencia, habrá de continuar quienes están en la actual representación, misma que está presidida por el PAN junto con el PRI y parte de los nuevos aliados priistas serán recompensados como la fracción parlamentaria del Movimiento Ciudadano por haber aprobado la Reforma Electoral.
Y es que en la pasada votación de la Reforma Electoral, los diputados perredistas decidieron no votar la misma por una aparente indicación de su líder nacional Jesús Navarrete, de ahí las repercusiones hacía la fracción del PRD.
En consecuencia tanto diputados priistas y panistas no quieren correr el riesgo de que el PRD pueda hacer de las suyas en lo que resta del año y meter iniciativas que se mantienen en la congeladora como la aprobación de los matrimonios entre el mismo sexo y apoyar otras iniciativas que tienen que ver con la diversidad sexual.
Cabe hacer mención, que el segundo periodo de sesiones habrá de iniciar el siguiente martes 4 de agosto, por lo que podría designar la nueva Mesa Directiva en la presente semana o bien hasta el lunes siguiente.
De concretarse el albazo, no sería la primera ocasión que por desacuerdos entre diputados.