- Educación
Voluntarios en el Programa de Inclusión y Alfabetización Digital (PIAD) de la Secretaría de Educación Pública (SEP) en conjunto con la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET) con el que se pretende la entrega de 22 mil tabletas digitales a alumnos de quinto año de primaria, denunciaron a este medio que existen graves y evidentes anomalías en el proceso mediante el que se revisó que éstas herramientas tecnológicas contaran con la calidad indispensable para cumplir con el rendimiento que se requiere para el aprovechamiento de los niños de educación básica.
Alumnos del Instituto Tecnológico de Apizaco (ITA) que pidieron omitir sus generales, dijeron que fueron invitados por parte de los encargados del PIAD con la promesa de liberar su servicio social además de recibir una remuneración económica de 240 pesos por día a cambio de que ellos revisaran las condiciones físicas y el software de las tabletas digitales durante los meses de julio y agosto.
Con respecto a irregularidades que encontraron en las tabletas digitales, refirieron que “los equipos vienen defectuosos del botón de encendido ya que estos se sueltan y ya no se puede prender el equipo, así como las baterías que no retienen la carga. Se le informaba al encargado de área, pero este al parecer coludido con el proveedor (que se encontraba un representante del proveedor durante todo el proceso), pasó por alto muchos defectos con los que venían los equipos y se entregaron así”.
“Un compañero también detecto que el Sistema Operativo que traen las tabletas es pirata ya que el proveedor utilizaba herramientas de Crackeo (KMSnano) para activar como original el S.O Windows y Office”, lo que igualmente dejaron pasar por la presunta colusión con el proveedor de estos aparatos.
Además de las supuestas anomalías que tienen en la contratación y el pago por el PIAD, ya que mientras uno de los lineamientos del programa dice que se deben laborar sólo 8 horas, los estudiantes se presume que eran conminados a trabajar por 12 horas, así como sábados y domingos, aunado a que presuntamente firmaron dos contratos uno con el sello oficial y otro sin éste.
Otro aspecto no menos importante, es que los voluntarios afirman que al momento de la entrada, cuando firmaban se percataron que otros más ponían su rúbrica pero que no laboraban dentro del PIAD, asimismo, les fue informado que el recurso con el que se les pagará se les otorgará en dos cheques para sumar la cantidad de 11 mil pesos, pero tendrán que debido a que sólo firmaron por uno, el otro lo tendrán que cambiar y regresar el dinero.
“Sabemos que los encargados del programa se quieren robar alrededor de 400 mil pesos, ya que el dinero que se va a regresar supuestamente va a estar destinado al pago de otro personal que participo en el proyecto y de otros gasto. Por otras fuentes, nos enteramos que el proyecto está financiado una parte por la SEP federal y otra por el Gobierno del Estado. En las listas aparecían alrededor de 80 gentes trabajando por lo que alrededor de 400 mil que va a ir destinados a los bolsillos de los encargados del proyecto. Cuando este dinero era para nosotros los que participamos y trabajamos jornadas de 12 horas”, concluyeron.