- Gobierno
Estudiantes de la Normal Rural “Benito Juárez” de Panotla chocaron con granaderos de la Comisión Estatal de Seguridad, al tratar de bloquear la carretera a San Martín Texmelucan, los efectivos policiacos utilizaron bombas de gas lacrimógeno y las normalistas piedras.
Alrededor de las 14:30 horas de este martes, varios grupos de normalistas que en conjunto sumaban unos doscientos estudiantes, iniciaron con bloqueos intermitentes en el distribuidor vial conocido como El Trébol en Tlaxcala, lo que obligó a la autoridad a intervenir permitir el libre tránsito a los ciudadanos.
Al menos seis puntos, estaban registrando bloqueos por varios minutos y de forma intermitente; lo que se prolongó por poco más de una hora, generando una importante afectación del avance de los vehículos automotores, y que por momentos torna crítico el poder avanzar en ese importante punto.
Sosteniendo mantas y carteles que contenían sus consignas, las normalistas -quienes tenían el rostro cubierto con algunas prendas-, buscaban ejercer presión para exigir sean atendidas sus demandas que están contenidas en el pliego petitorio presentado hace unos días al gobierno local.
Un contingente de aproximadamente un centenar de estudiantes de la normal rural, apoyadas por alumnos de otras instituciones de Hidalgo, Veracruz, Oaxaca, Puebla y Guerrero bloquearon el acceso carretero, incluso algunos automovilistas quedaron atrapadas.
Durante varios minutos, el comisionado Oreste de Jesús Estrada Miranda, trato de disuadir a los estudiantes para que se retiraran pero los ánimos estaban encendidos y los estudiantes no escucharon razones, ni se calmaron.
Por el contrario el arribo de más elementos policiacos los enardeció y decidieron colocar una bandera roja con letras negras, para bloquear totalmente el acceso principal a la ciudad de Tlaxcala.
Esto detonó la orden de ataque a los granaderos, quienes lanzaron al menos seis bombas con gas lacrimógeno, que ni así lograron dispersar a los alumnos, en su mayoría mujeres.
Luego al tratar de liberar la carretera, los granaderos y los estudiantes se enfrentaron cuerpo a cuerpo, pero los alumnos sacaron la peor parte, algunos de ellos fueron golpeados.
Como efecto del gas lacrimógeno, los alumnos se dispersaron, pero se defendieron lanzando piedras y botellas contra los granaderos, quienes sometieron a algunos cuantos, pero fueron liberados por sus compañeros.
Negros nubarrones eran testigos del enfrentamiento entre alumnos y policías en las inmediaciones del recinto ferial, donde llegaron más elementos policiacos a bordo de una docena de patrullas a sirena abierta.
En tanto los estudiantes pedían que se denunciara la agresión y culparon de lo que ocurra a los tres niveles de gobierno, en especial al Gobierno del Estado, ante una pertinaz lluvia, los estudiantes comenzaron la desbandada.
Hombres y mujeres corrían por las calles aledañas, acusaban los efectos del gas lacrimógeno, pero no fueron perseguidos y a toda carrera se dieron a la fuga, sin que permitieran que los policías se llevaran a detenidos.
Al cierre de esta edición, se ignora si hay estudiantes detenidos y priva la incertidumbre por la celebración de la ceremonia del grito de Independencia, debido a que el enfrentamiento ocurrió a escasos 700 metros del Centro Histórico de Tlaxcala.
Minutos después, el secretario de gobierno Ernesto Ordóñez Carrera acudió al lugar para dialogar con la comisión de las normalistas, quienes lejos de reconocer su actitud que por momentos se tornó vandálica, reprochaban la acción de los uniformados a unos metros del módulo de vigilancia con que cuenta ese distribuidor vial.
No obstante que la situación estaba violenta, las normalistas intercambiaban comentarios con el responsable de la política interna, quienes pretendían hacer que su ley prevaleciera mediante frases cargadas de coraje y ofuscación, esto justo cuando la gresca terminaba al momento de que los normalistas emprendían la retirada con una desbandada a pie.
A pesar de la lluvia los ánimos no se calmaron del todo, ya que algunos de los manifestantes permanecen en el lugar, lo que es observado por un grupo de anti motines que permanecen en el lugar en espera de cualquier señal para entrar de nueva cuenta en acción.
Ya que un grupo de unos cien estudiantes, permanecen a un costado de la carretera federal México-Veracruz a la altura del entronque del Libramiento a Tlaxcala, reunidos y buscando reorganizarse, ya que el frágil diálogo que se tenía con Ordóñez Carrera se rompió de momento, lo que mantiene en una tensa calma la fría y húmeda tarde.
La refriega se prolongó por varios minutos y dejó como saldo varias unidades con afectaciones en su infraestructura, entre las que se encuentra el de un particular que tiene un depósito de venta de cervezas en ese punto carretero que sufrió los estragos de manera colateral al ser impactado en su medallón trasero por un cilindro que contenía gas lacrimógeno, y también al menos dos personas aseguradas, las que se espera serán puestas a disposición de la autoridad competente.