- Seguridad
Fue que alrededor de las 10:30 horas del día en curso, vecinos que radican sobre la calle 5 de mayo de la comuna de San Miguel Xaltipan perteneciente al municipio de Contla alertaron al servicio de emergencias para informar que un hombre yacía tirado en aparente estado inconsciente y lacerado en un predio cerca de la "Capilla del Niño Doctor" que se encuentra en ese misma zona.
Tanto cuerpos de seguridad local como los paramédicos pertenecientes a la Cruz Roja arribaron al lugar señalado, encontrando a un varón aparentemente de 55 años de edad, amarrado, lacerado, boca abajo, con múltiples golpes contusos en cara y en cuerpo muy evidentes, su pulso era débil por lo que los paramédicos le dieron los primeros auxilios para posterior trasladarlo al nosocomio más cercano.
Al arribo de las fuerzas del bien, el hombre tartamudeaba por lo que le cuestionaron su nombre y lo ocurrido ante lo que este hecho el hombre solo respondió que había sido asaltado por un monto aproximado de diez mil pesos por dos sujetos que no conocía y que se llamaba Isidro Nava.
Los vecinos presentes dijeron que por las características de los golpes, los rufianes se habrán hecho valer de su fuerza para usarla contra el quincuagenario y "dormirlo", aprovechándose así para perpetrarlo en su propio domicilio -"ya que solo cuida su rebaño y no tiene enemigos" argumentaron.
Por los hechos señalaron los presentes que probablemente amaneciendo fue cuando los hampones lo amagaron a golpes en su rostro hasta quedar inconsciente, para luego ser despojado de sus bienes y ser arrojado cerca de su hogar en un predio abandonado.
Añadieron que el hombre es artesano y también “tiene animalitos” dedicándose cada temporada a la crianza y venta de ganado bovino, afirman que su rebaño tiene crías y fue que recientemente en este mes de marzo fue cuando el comerciante había recibido visitas de gente de la región.
Según una vecina que prefirió mantener su nombre en anonimato atestiguo que durante esta última semanas llego a percatarse de un automóvil de apariencia sospechosa que merodeaba de vez en cuando la calle, y que supone ella pueden ser los malhechores.