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La lucha por la gubernatura continúa, sigue más fuerte que nunca con el apoyo del PRD y es por Tlaxcala, por la gran mayoría de mis paisanos que siguen viviendo en la marginación, la pobreza y la inseguridad, declaró Lorena Cuéllar Cisneros durante el fin de semana.
El deseseado y fraudulento proceso electoral que vivimos los tlaxcaltecas este año, es la pretensión del poder estatal de propinar un golpe a la democracia y de pisotear la voluntad de los ciudadanos, afirmó Cuéllar Cisneros y agregó que: "es con el invaluable apoyo del PRD estatal y nacional, como se revertirán los resultados de una elección a todas luces manipulada para imponer la continuidad de un Gobierno que le ha hecho mucho daño al desarrollo de Tlaxcala".
El dirigente estatal del partido, Juan Manuel Cambrón, dijo Lorena, nos ha expresado y ratificado el apoyo que tenemos de todos los militantes, a la causa justa y legítima de luchar por las vías legales, para la anulación de la elección de gobernador del Estado, por todas las violaciones a las leyes respectivas, en que incurrió el PRI y su candidato.
"Nuestro líder estatal, me ha dicho y lo agradezco, que unidos los perredistas de la entidad, podemos defender el triunfo que pretenden arrebatarnos y coincidimos en que hemos logrado una votación histórica, un reposicionamiento del PRD entre los electores que nos ven y así lo manifestaron en las urnas, como la alternativa para sacar a Tlaxcala del estancamiento económico y la pobreza", añadió Cuéllar Cisneros.
La próxima renovación de la dirigencia nacional, señaló además Lorena Cuéllar, también es la oportunidad para reforzar el apoyo del PRD a la lucha que se ha emprendido en Tlaxcala para defender el voto ciudadano, "como muy bien la hemos tenido de Agustín Basave, de su Comité Ejecutivo Nacional y de todos nuestros compañeros legisladores tanto de la Cámara de Senadores, de Diputados y por supuesto de los locales".
Finalmente, Lorena Cuéllar, refirió que cada día son más los tlaxcaltecas que expresan su inconformidad por el fraude electoral del 5 de junio, "por un abuso en el uso indebido de recursos públicos para beneficiar al candidato oficial, comprando voluntades ciudadanas, pervirtiendo la democracia y peor aún, con la complicidad de la autoridad electoral que permitió ser manipulada por intereses oscuros, dictados desde la principal oficina de Palacio de Gobierno".