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  • Roberto Nava Briones
Nadie les hace caso a empleados del Seguro Popular a pesar de evidente abuso de autoridad y hasta acoso sexual sufren empleadas

Trabajadores de la Secretaría de Salud (SESA) adscritos al Seguro Popular solicitaron a la contraloría del Ejecutivo realizar una auditoria en la dependencia ya que existe una pandilla que realiza tráfico de influencias, componendas, abuso de poder y hasta relaciones amorosas protagonizan al interior de la dependencia.

De acuerdo con la denuncia que hicieron llegar a e-consulta, evidenciaron diversas irregularidades que privan en esa dependencia estatal; “nos gustaría hacer del conocimiento del público en general y de autoridades de Gobierno del Estado y de nuestras propias oficinas, las anomalías que tienen años llevándose a cabo aquí en el seguro popular”.

Los denunciantes pidieron la gracia del anonimato por temor a perder sus empleos; “muchos de mis compañeros auxiliares y demás personal de afiliación hemos estado aguantando por mucho tiempo distintas irregularidades, por parte de tres personas en mandos superiores”.

Entre las irregularidades resalto que; “el Subdirector de afiliación Miguel Ángel Flores Sánchez es una persona prepotente, amenazadora, sin calidad moral, burlón, y que constantemente ejerce un tipo de terrorismo laboral hacia nosotros, sus actitudes hacia nosotros dependen de lo que le guste o no le guste al señor”

“…si nosotros lo veneramos como a un Dios, le decimos que si a todo, él es una dulce palomita con nosotros o más bien con las compañeras que se prestan a eso, si nosotros -que somos muchos- no concordamos con sus ideas, él se encarga de hacernos la vida difícil, de tratar de aburrirnos, castigándonos enviándonos lejos para que nos aburramos y renunciemos”, agrega la denuncia, misma que sugiere corroborarlo con la plantilla de gente de módulos.

En contraste, la actitud del funcionario es diferente para sus aduladores; “la gente que le endulza el oído, está muy bien colocada, goza de permisos, vacaciones, y otros privilegios”.

Además evidenciaron a más empleados del sector salud con cargos directivos como si fueran una pandilla que ostentan supuestos familiares de funcionarios del Gabinete estatal; “el coordinador de afiliación Oscar Velasco, esta persona hace alarde de ser sobrino del Oficial Mayor…parece el gatillero del subdirector de afiliación y de la jefa de departamento de afiliación”.

Según la denuncia, las empleadas de esa dependencia estatal son acosadas y hay represalias para aquellas que no cede a los caprichos de los Juniors; “…a las compañeras que le rinden tributo -tienen privilegios-, visitando módulos, -raramente solo visita los de compañeras donde es venerado- aparte de pasársela acosando a cuanta compañera puede mediante el Whatsapp…si acceden tienen privilegios sino, les hacen la vida imposible”.

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