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Nuevamente, por falta de quorum el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Julio César Álvarez García, declaró suspendida la sesión que se había reanudado la tarde-noche de este miércoles, razón por la cual quedó congelado el procedimiento de aprobación de la totalidad de cuentas públicas del ejercicio fiscal 2015, tan solo lograron abordar seis de un total de 29 pendientes.
No sin antes aprobar por mayoría de votos el decreto mediante el cual se reforma el artículo primero transitorio del decreto número 224, publicado en el Periódico del Gobierno del Estado en mayo de este año, referente a las reformas y adiciones a diversas disposiciones normativas de la Ley de Fiscalización Superior del Estado de Tlaxcala y sus Municipios, para conseguir una ampliación de término para la aprobación de cuentas públicas que tiene como plazo constitucional el 31 de agosto.
En el documento que fue leído en el Pleno, y que presentaron las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Gobernación y Justicia y Asuntos Políticos y Finanzas y Fiscalización, argumentan que “en las reformas efectuadas a la normatividad en materia de fiscalización de cuentas públicas se estableció un nuevo plazo a este Poder Legislativo, se acortó este para la dictaminación de las cuentas públicas, en 60 días, por lo que es DIFÍCIL que se dé el cumplimiento del precepto descrito anteriormente, si fue iniciado con la legislación anterior y si no se previeron los mecanismos técnicos para que pudiera entrar en vigor”.
Por lo cual, consideraron que “es prudente que dicha normatividad cobre vigencia hasta el día primero de enero del año dos mil 2017, a efecto de que el último trimestre del ejercicio fiscal del presente año, sea dictaminada a más tardar el 31 de agosto del próximo año y así subsecuentemente todos los demás ejercicios”.
Lo anterior para que la entrada en vigor, debe de contar con el tiempo suficiente para que la Comisión de Finanzas y Fiscalización, pueda realizar su labor debidamente.
Una vez aprobado ese acuerdo por mayoría de votos, los congresistas solo esperaron escuchar y aprobar la dictaminación de las cuentas públicas de los municipios de Zacatelco, Tlaxco, Santa Cruz Tlaxcala, Nanacamilpa, Ixtacuixtla, y Calpulalpan, todos con salvedad debido a que presentan observaciones de probable daño patrimonial que no fueron solventadas en el dictamen, para posteriormente abandonar de a poco la sesión hasta que solo quedaron en el Pleno 12 diputados, mientras que los demás abandonaron la sesión.
Ante la falta de quorum, el presidente de la Mesa Directiva declaró suspendida la sesión, de esa manera los congresistas faltaron al ordenamiento Constitucional de aprobar las cuentas públicas de los entes fiscalizables a más tardar el 31 de agosto posterior al ejercicio fiscalizado, dejando así pendientes 23 estados financieros de municipios como Chiautempan, Apizaco, Huamantla, Papalotla, Tlaxcala, Nativitas, por mencionar algunos, así como de Comisiones de Agua Potable de diversos municipios, y de la Comisión de Acceso e Información Pública.
Los legisladores que abandonaron la sesión fueron: los perredistas Salvador Méndez Acametitla, Erendirá Jiménez Montiel, Santiago Sesín Maldonado; los panistas, Ángelo Gutiérrez Hernández e Iván Cuapantecatl; los priistas, Florentino Domínguez Ordoñez, Ángel Xochitiotzin, Heriberto López Briones, Javier Vázquez Sánchez ; el del Verde, Albino Mendieta; del PAC Evangelina Paredes y Lincoln Rodríguez; entre otros.
La falta de responsabilidad de los diputados que abandonaron la sesión provocó la molestia de los integrantes de la Comisión de Finanzas, en espacial de las diputadas Juana de Guadalupe Cruz Bustos, María Antonieta Stankiewicz Ramírez y Angélica Zárate, quienes reclamaron respeto para el trabajo previo que habían hecho para la lograr la presentación de dictámenes aunque fuera sobre el tiempo.
También permanecieron en Pleno, los diputados Roberto Zamora, Armando Ramos, Gilberto Temoltzin, Juan Ascensión Calyecac, Arturo Díaz, Humberto Macías, Sinahí Parra, María de Lourdes Huerta, quienes también mostraron su inconformidad exigieron a sus compañeros de legislatura que permanecieran en la sesión para cumplir con la aprobación de cuentas públicas tal como lo marca la ley, alegando que era su obligación, aunque dichos argumentos no provocaron ninguna respuesta de parte de los diputados que al final abandonaron el pleno.