- Política
Ante la inminencia de que el próximo sub secretario de Gobierno, Zoé Robledo Aburto lo pusiera como “lazo de cochino” por las acciones emprendidas a favor de los intereses del Partido Revolucionario Institucional (PRI) como presidente de la Junta de Coordinación y Concertación Política (JCCP) y en su momento como coordinador de la fracción parlamentaria del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) en el Congreso del Estado, Víctor Báez López desistió de acudir a la reunión que tuvieron los diputados locales y federales de la coalición “Juntos Haremos Historia” con quien es una de las personas más cercanas al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Al conclave que se llevó a cabo en la Ciudad de México fueron invitados 16 de los 17 diputados locales que forman parte de la coalición “Juntos Haremos Historia” en el Congreso local, sólo la dueña del Partido del Trabajo (PT) en el estado, Irma Garay Loredo no fue requerida por razones desconocidas.
A la reunión desistieron además de Víctor Báez, los petistas María Félix Pluma Flores y Michaelle Brito Vázquez, en ambos casos por cuestiones personales; mientras que por parte de los morenistas la encargada de la fiscalización de los entes públicos y muy cercana al grupo priísta que encabeza el zacatelquense Báez tampoco asistió.
En conclusión Zoé Robledo instó a los legisladores a que se pongan a trabajar de manera conjunta en favor de las acciones que habrán de emprenderse encabezadas por López Obrador y dejen la tentaciones de las que puedan ser objeto por parte de los intereses en este caso del gobierno loval del PRI.
Y es que el próximo sub secretario de Gobierno conoce la problemática respecto a la traición que ha realizado el grupo de legisladores que comanda Víctor Báez, quien justificándose en el supuesto apoyo de Gonzalo López Beltrán, hizo pactos con el gobierno del estado para imponer a sus fichas dentro de las direcciones en el Poder Legislativo.
Esta vez el dirigente estatal de MORENA, quien se presume que también es afín a los intereses priístas escuchó y calló luego de que su grupo se viera descubierto en un franco amasiato con la administración estatal para controlar el Poder Legislativo en favor del inquilino de la casa de gobierno.
De manera general, la reunión fortaleció al grupo opuesto a los priístas vestidos de morenistas como Víctor Báez, Chema Méndez, Rayo Netazahuatl, Rolando Pérez, Patricia Jarmilla y la vividora del PT, Irma Garay.
La instrucción fue clara, trabajar en favor de la cuarta transformación del país y no ser comparsa de los intereses del gobierno del estado, siendo Víctor Castro uno de los que recibió el espaldarazo por parte de la próxima administración federal para trabajar en el tema de la salud y no permitir que una lideresa sindical corrupta lo reconvenga.