- Salud
La licenciada María Yazmín Badillo Luna, Supervisora de Trabajo Social del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tlaxcala, comentó que los hábitos saludables y la prevención de enfermedades son tan importantes como buscar atención médica cuando se está enfermo.
Recomendó a los familiares de adultos mayores generar condiciones permanentes de salud y autocuidado para ellos, que les generen bienestar, comenzando con hábitos de vida saludable como: una alimentación correcta, práctica de actividad física, reconocer situaciones de riesgo de accidentes, violencia y adicciones, postura correcta, así como consejos para un envejecimiento activo y saludable.
El IMSS ha creado la Estrategia Educativa de Promoción de la Salud “Envejecimiento Activo PrevenIMSS”, a través de grupos educativos dirigidos a los adultos mayores, donde les enseñan que la mejor inversión es el cuidado de su salud, para prevenir enfermedades, retrasar la complicación de algunas de ellas y evitar riesgos innecesarios.
“La Estrategia Educativa consiste en empoderar a mujeres y hombres de la misma edad, proporcionándoles elementos que les permitirán intercambiar conocimientos, harán nuevas amistades, fortalecerán sus valores y habilidades para la vida; el curso se dará a través de dinámicas lúdico, vivenciales con grandes experiencias, y al mismo tiempo aprenderán a cuidar su salud y la de su familia”, detalló la supervisora.
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La familia juega un papel importante en el cuidado del adulto mayor, y se recomienda tener una comunicación permanente con ellos, y si por motivos de salud, distancia o trabajo, no puede ser de forma presencial, es importante hacerlo vía telefónica o a través de videollamada.
Existen grandes beneficios para las y los adultos mayores que realizan actividad física, por ejemplo: conservan su independencia física y mental; mejora el trabajo del corazón, ayuda a que se normalicen la presión arterial y los niveles de azúcar y grasas en la sangre, fortalece el sistema respiratorio y el muscular, ayuda a controlar o disminuir el peso, disminuye el estrés, mejora la calidad del sueño y el descanso físico, mejora la memoria, la autoestima y la sensación de bienestar, además el cuerpo libera hormonas de placer y felicidad que le hacen sentir bien.
Realizar actividad física le ayuda a prevenir enfermedades y mantener un estado de salud adecuado; sin embargo, para la mayoría de los adultos mayores, las actividades diarias no son suficientes, por lo que se recomiendan ejercicios para mantener la resistencia, la flexibilidad y la fuerza.
“Es importante que los adultos mayores que deseen iniciar una rutina de ejercicios, acudan primero con su médico familiar de su Unidad de Medicina Familiar (UMF) que les corresponda, para que evalúen de manera integral su estado de salud”, subrayó Badillo Luna.
Los adultos mayores son más susceptibles a sufrir accidentes, esto se debe a la disminución de la vista, el oído o a la falta de fuerza muscular. Por estos cambios, es necesario que aprendan a medirse y que reconozcan su capacidad física y sus limitaciones, lo cierto es que como en otros grupos de edad, la mayoría de los accidentes suceden por falta de cuidado, por eso es necesario extremar precauciones.
Se recomienda que los apagadores y contactos los tengan al alcance de la mano, los muebles no deben estorbar el paso; se deben fijar los estantes y libreros a la pared; cuando haga frío, evite dormir con la estufa encendida, fogones, anafres o chimeneas; se deben tener bien iluminadas todas las áreas, en especial la escalera, la cual debe tener barandal o pasamanos y material antiderrapante en los escalones; se debe cuidar que los pisos no sean resbalosos ni tengan irregularidades u objetos con los que se pueda tropezar.
“Un adulto mayor requiere cuidados estrictos, alimentación sana y nutritiva, control de medicamentos conforme fueron recetados para evitar un cuadro de descompensación, no bajar la guardia ante el aumento de enfermedades respiratorias, continuar con las medidas de seguridad e higiene, como uso correcto de cubrebocas, lavado de manos con agua y jabón o con alcohol gel al 70 por ciento, y mantener la sana distancia, en caso de presentar alguna molestia, no dudar en llevarlo al médico, pues es importante su valoración clínica y su tratamiento médico u hospitalario, para evitar complicaciones mayores”, finalizó la especialista.