Las manifestaciones por sus aprobaciones se multiplican, finalmente este jueves los jubilados y pensionados les doblaron las manos, pero eso fue después de seis horas y de que los profes rompieran la cadena y el candado para entrar a la llamada “Casa del Pueblo”, ahí la llevan los chairos.
Mientras como balde de agua fría se recibió en Tlaxcala la noticia de que dentro de la Cuarta Transformación, el nuevo gobierno federal “reoriento” y quitó de tajo el presupuesto que otorgaba a 121 pueblos mágicos del país.
Y solo es el principio.
Sin duda, esta primera quincena de enero va a quedar registrada en los anales de la historia como una de las más complicadas para el inicio de un gobierno en México, debido a que se inició una lucha frontal contra el huachicoleo.
A medida que se ha descubierto la corrupción en las entrañas de Pemex, el gigante de la corrupción se ha levantado y era mucho, pero mucho más grande de lo que pensaban los gobernantes y las autoridades.
Ya se dieron cuenta que desde las propias instalaciones de Pemex estaban colocadas las mangueras y de ahí en adelante en miles de kilómetros de gasoductos se ha descubierto lo que ya se sabía desde hace años.
Es el principio, porque las miles de personas que ya vivían del huachicol se niegan a dejar de obtener sus millonarios ingresos y lo peor está por venir al constatar que muchas gasolineras se surtían de gasolina robada.
Es cuestión de tiempo y sin duda los huachicoleros van a reaccionar como animal herido de muerte, lo malo es que pueblos enteros se dedican a esa ilícita activad, al no haber otras oportunidades de trabajo.
Sin duda la gente que se metió al robo, transporte y almacenamiento de combustible ilegal sabía a lo que arriesgaba, pero no tanto y ya la desesperación los obliga a robarse las pipas llenas de combustible, pero no hay marcha atrás.
Pero falta mucho terreno por vigilar y controlar, sin perder de vista que viene el tema del gas licuado de petróleo, y basta recodar que no hace mucho en Tlaxcala se decomisaron pipas llenas de gas robado y la situación se complica.
Mientras que en Tlaxcala nos dijeron que la Secretaría de Cultura se vendría completa para Tlaxcala, pero lo que hemos visto a la fecha es algo así como una de las antiguas delegaciones federales.
Llegaron 25 funcionarios que van y vienen, y aquí se demuestra que del dicho al hecho… hay mucho trecho y no es tan fácil prometer que hacer realidad los sueños y anhelos, todo lleva su tiempo y habrá fracasos y aciertos.
Esto si tomamos en cuenta que la actividad federal que realizaban las 46 delegaciones en Tlaxcala tendrá sus efectos inmediatos, por ejemplo en el controlo del daño ambiental que realizaba la Profepa.
La defensa de los consumidores de la Profeco, lo que hacían las otras dependencias están en espera de su transformación y todo depende de pocas personas y en especial de la súper delegada Lorena Cuéllar Cisneros.
Mientras se pone orden en la casa y las delegaciones se liquidan, hay situaciones que llaman la atención como es el caso del recorte a los pueblos mágicos a nivel nacional.
Como se recordará, el año pasado la Secretaría de Turismo del Estado, anunció que 10 municipios de Tlaxcala obtuvieron su folio de ingreso como aspirante a la denominación del Programa “Pueblos Mágicos”, al cumplir con los elementos y lineamientos que se establecen en el esquema nacional.
Roberto Núñez Baleón, titular de la Secture, indicó que Tlaxcala participaba con 10 de los 83 municipios del país que se inscribieron para obtener la denominación y que les permitirá pasar a la siguiente etapa para demostrar la riqueza cultural e histórica que poseen.
“Es importante destacar que Tlaxcala es uno de los estados que a nivel nacional obtuvo un mayor número folios, teníamos 14 aspirantes y 10 de ellos lograron pasar la primera etapa, lo que evidencia el amplio potencial turístico de la entidad y el trabajo que se realiza para fortalecer esta vocación”, subrayó.
Contla de Juan Cuamatzi, Ixtacuixtla, Nanacamilpa, Nativitas, San Pablo del Monte, Tepeyanco, Tetla de la Solidaridad, Totolac, Zacatelco y Terrenate, son los municipios que por su riqueza histórica, cultural, gastronómica y natural obtuvieron el ingreso para postularse como Pueblos Mágicos.
El Secretario de Turismo destacó que aspectos como la elaboración del cacao, las máscaras de carnaval, el Santuario de las Luciérnagas, los Cuatro Señoríos de la República de Tlaxcallan, la zona de haciendas, de monumentos y arqueológicas; además, de la gastronomía fueron los elementos que consideró el comité evaluador de cada municipio.
“Cada municipio tiene sus propios elementos, el estado se caracteriza por ofrecer alternativas de turismo cultural, de naturaleza y gastronómico, entre otros aspectos que les otorgan la oportunidad de obtener esta denominación”, enfatizó.
Los municipios tendrán hasta el próximo 26 de enero para integrar el expediente y cumplir con los requisitos que establece el programa para obtener la denominación como “Pueblos Mágicos”.
Pero todo ha quedado en puros sueños guajiros.
En la tierra de la realidad, como parte de la reorientación del gasto en 2019, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) revisó 156 programas sociales y después de hacer una evaluación “metió tijera” a 100 programas sociales, por lo que este año operarán 56 programas sociales federales.
El subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, confirmó el recorte en los programas sociales a cargo del gobierno federal, “eran más de 100 programas y quedaron alrededor de 50 programas”.
El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2019 plantea maximizar los recursos disponibles para el gasto social, ello mediante una reconfiguración de los programas presupuestarios con base en el desempeño del impacto de estos en el ámbito social.
A partir de ello, se revisaron 156 programas sociales y tras iniciar un proceso de eliminación, fusión o reducción de programas que se consideran duplicados, que no cumplen con su propósito o que ya lo cumplieron, se determinó suprimir 100 programas sociales para quedar en 56 programas sociales a cargo del gobierno federal.
“Con la eliminación de programas y gastos con poco impacto social y productivo se contribuirá a financiar gasto en infraestructura y programas sociales prioritarios, lo cual incrementará la eficiencia en el presupuesto sin comprometer la disciplina fiscal”, suscribe el documento.
El documento del PPEF contempla para el próximo año 56 programas sociales sujetos a reglas de operación, entre los que se encuentran la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores, que tendrá un presupuesto de 100 mil millones de pesos para otorgar apoyos a los adultos mayores de 68 años y más.
El documento detalla que, por ejemplo, desaparecerá el Programa de Empleo Temporal (PET) que estaba a cargo de SCT, Sedesol y Semarnat; así como el programa de Comedores Comunitarios a cargo de Sedesol y también desaparece el Programa de Desarrollo Regional Turístico Sustentable y Pueblos Mágicos a cargo de la Secretaría de Turismo.
De acuerdo a la información, para 2019 no habrá una asignación de recursos específica para los Pueblos Mágicos de México, por lo que los municipios que cuentan con esta declaratoria, no tendrán una bolsa específica de la que puedan atraer financiamiento para mantener su declaratoria.
La Secretaría de Salud pasa de 8 a 6 programas sociales con reglas de operación, SEDATU tenía 6 programas y el próximo año se quedaría en 4; Semarnat tiene 5 y pasa a 6; Sedesol tenía 14 y pasa a 7, aunque en este caso es de mencionar que algunos como Liconsa o Diconsa pasan ahora a ser operados por la Secretaría de Agricultura.
El Programa de Apoyo al Empleo (PAE) permanecerá a cargo de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), y ahora con estos recortes, los pueblos mágicos de Huamantla y Tlaxco deberán de “rascarse con sus propias uñas”.
Mientras solo el gobierno estatal puede llevar adelante los programas de ordenamiento y mejoramiento urbano en los municipios, para atraer al turismo, lo que significa para los chairos que votaron parejo y como justificación dicen que… LA REVERSA TAMBIÉN ES AVANCE.