Cuando todo tiene buen inicio, el tiempo transcurre sin sentir, y en Tlaxcala ya estamos transitando en el penúltimo año de gobierno de Marco Mena, lo que origina que varios personajes de la política estatal estén más preocupados por realizar eventos donde puedan posicionar su imagen política, que en difundir el trabajo de tres años de gobierno, si usted estimado lector lee o ve los diferentes medios de comunicación se dará cuenta que los políticos que aspiran a un puesto de elección popular y que se sienten formar parte del primer círculo del gobernador, son los que más reflectores acaparan , aunque no son los que mayor aceptación tienen en la sociedad tlaxcalteca, situación que debe cuidar la gente del gobierno si quiere conservar el poder en el 2021.
Algo que llama la atención en las esferas gubernamentales y partidistas priistas, es la opacidad con la están actuando quienes deciden el rumbo del PRI, ya que a más de dos meses de que el PRI, anuncio con platillos y bombos, el cambio de la dirigencia estatal, no hay nada, no hay certeza de quién va ser el dirigente estatal, el PRI, tiene vida porque es el partido del gobernador y porque en el PRI, está el hermano del ejecutivo, si no estaría muerto, no hay quien se encargue de dirigir y organizar los destinos del partido tricolor, algunas voces dicen que los priistas están esperando saber quién va dirigir MORENA, para nombrar su nueva dirigencia estatal, suposición que suena rara, ya que si el PRI, tiene el poder Ejecutivo, lo más lógico sería, ya tener un líder, que organice los destinos de un partido que de ser primera fuerza política, hoy está en tercera posición, con varios tiradores pero todos viendo sus conveniencias personales y de grupo, si no cómo explicar el auto destape de Enrique Padilla.
Pasando a otro tema, a menos de dos meses de que el Ejecutivo Estatal, dé a conocer su penúltimo informe de gobierno, los comentarios en torno al trabajo del gobernador Marco Mena, en general son de aceptación, aunque hay algunos pendientes principalmente en seguridad y salud, donde las cosas no marchan bien, en los tres años de gobierno, la actividad principal de este gobierno se ha centrado en obras de infraestructura con tres obras que se consideran hasta el momento como las más emblemáticas de esta gestión gubernamental, la remodelación del estadio Tlahuicole, obra que hasta el momento, dicen lleva un avance del 80 por ciento, aunque solo presenta la construcción del graderío y el levantamiento de algunas bardas, pero que a la vista pública no muestra una arquitectura modernista que pueda ser considerada prototipo de la era moderna en que vivimos, ojalá en estos dos meses que faltan para que se termine el año, las constructoras encargadas de las obras transformen el inmueble deportivo, en un espacio agradable para la convivencia familiar y para la realización de eventos sociales, culturales, deportivos y artísticos, de primer nivel, pues de no hacerlo sería lamentable el haber tirado la “Escuela de Educación Física”, y el “Aula Seis” dependiente de la USET, para montar un elefante blanco. Otra obra importante del actual gobierno es la ampliación de la autopista Tlaxcala –Apizaco, obra que en un año y meses, lleva un gran avance, pero que a muchos tlaxcaltecas, les ha creado la duda, ya que es una inversión multimillonaria que quizás pudo haberse planeado sin tanto dinero, ya que hay tramos carreteros y puentes que quizás no eran tan necesarios, si bien esta carretera es una obra magna, que le da una buena visión modernista al estado, las constructoras deben prever que la ampliación de carriles de tránsito vehicular, no sea de alta velocidad, pues si no, será lo mismo, ya que la velocidad es el principal motivo que origina los accidentes, otra obra es la construcción del hospital general, construcción que lleva según algunos analistas entre un 30 y un 40 por ciento de construcción, sin duda que esta puede ser la obra más importante del gobernador, por su importancia social, ya que sí es un hospital de tercer nivel, con un equipamiento de primer mundo y con una estructura que pueda albergar las diferentes especialidades médicas, esta obra seria emblemática, ya que actualmente muchos tlaxcaltecas se trasladan a la Ciudad de México o a otros estados, para realizarse estudios u operaciones quirúrgicas, desembolsando grandes cantidades de dinero, de concretarse dicha obra, sería un legado para los tlaxcaltecas, ojalá estas tres obras, y las restantes siete obras que el gobernador se comprometió en realizar, realmente beneficien a la sociedad tlaxcalteca, que no sean elefantes blancos como La plaza Bicentenario.
Pasando a otro tema, tanto el gobierno del estado como la presidencia municipal de la capital, vienen realizando un gran trabajo en el aspecto turístico y cultural, con la organización de eventos artísticos, deportivos y culturales, que muestran las costumbres y tradiciones de nuestro estado, lo importante de esto es la gran participación de gran parte de la sociedad tlaxcalteca, así como de visitantes nacionales y extranjeros, sin duda que los eventos del “Cervantino”, del “Aniversario de la fundación de Tlaxcala”, del Festival Internacional de Títeres “Rosete Aranda” y de la ya próxima “Feria de Tlaxcala 2019”, permiten mostrar la riqueza turística y cultural de nuestro estado, ahora solo queda saber planear bien esos eventos, ya que cerrar calles y desviar el tráfico, crea un gran problema, no sólo vehicular, si no de las personas que tienen necesidades como llegar al trabajo, ir al doctor o de llevar a sus hijos a las escuelas, hay espacios donde pueden realizar los eventos sin causar muchas molestias a terceros, también sería bueno que tanto el gobierno del estado, como la presidencia municipal de Tlaxcala, se coordinaran para arreglar el primer cuadro del centro, ya que tanto los portales como el Zócalo están en pésimas condiciones, principalmente el piso y sus jardines, es prioritario que ya no se utilice el parque como tianguis. Otra vía que es importante arreglar es la calle de la Colonia “Adolfo López Mateos” que conduce al acceso principal a la Feria de Tlaxcala, ya que se encuentra llena de baches y da mal aspecto a todos los visitantes naciones y extranjeros que llegan a Tlaxcala a disfrutar de la feria.