La gobernadora Lorena Cuéllar ha confirmado que en este mes se hará la designación del nuevo secretario de seguridad ciudadana, luego de la huida del primero y la renuncia del último, surgió la duda sobre quién recaería la tarea de seguridad pública en el estado.
Mucho se espera del próximo secretario, porque los resultados ahí están, Tlaxcala se ha consolidado como un estado con la menor incidencia delictiva, lo que se traduce en seguridad. No estamos hablando de encuestas o sondeos, sino de datos reales que refieren que la estrategia en nuestra entidad, está dando frutos.
Ciertamente la unción de los secretarios de este ramo puede ser un dolor de cabeza para la gobernadora y su equipo más cercano, sin embargo, más allá de los personajes, las filias y fobias, hay que prestarle atención a los resultados.
Mucho se ha dicho en cuanto a los perfiles, pero no perdamos de vista que, a pesar de que varios han pasado por el despacho de la SSC, la estrategia ha sido la misma desde el principio, tan es así que hoy, teniendo un “encargado del despacho” y además de la mala imagen de la secretaría, se siguen atendiendo delitos y situaciones de riesgo.
Quien llegue no sólo deberá limpiar la mellada imagen que erróneamente se ha construido alrededor de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, también tendrá la obligación y el reto de mejorar los resultados, porque algo es cierto, que Tlaxcala por quinto mes consecutivo sea el estado más seguro no es una coincidencia ni casualidad, sino el resultado de la estrategia en coordinación con los órdenes municipal y federal.
Pronto tendremos nuevo secretario de seguridad, pronto sabremos a quién le debemos exigir cuentas y buenos resultados. Ojalá que quien llegue dure en el cargo.