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Los hechos ocurrieron a las 00:40 horas, del 2 de julio.

La Policía Ministerial del Estado, detuvo al abogado Alberto Hernández Morales por agredir física y verbalmente a un agente cuando trasladaba a dictaminar a un detenido al área de Servicios Periciales, toda vez que el litigante intentó sacarlo de la Procuraduría General de Justicia del Estado (Pgje) y así evadir a la  justicia, ya que enfrenta dos denuncias: la primera por delitos cometidos contra funcionarios públicos y lesiones, y la segunda por homicidio.

Los hechos ocurrieron a las 00:40 horas, del 2 de julio, cuando un agente ministerial trasladaba del área de separos a la Dirección de Servicios Periciales de la Pgje a un detenido para que le practicaran un examen de integridad física, en ese momento, se aproximó al detective un trio de individuos que con palabras altisonantes y agresiones físicas intentaron quitarle al asegurado para que pudiera escapar de la Dependencia.

Acto seguido, el Policía Ministerial solicitó apoyo, por lo que de inmediato acudieron en su auxilio dos agentes quienes lograron asegurar al litigante, que continúo agrediendo verbalmente a los detectives con el argumento de que es una persona influyente.

Por lo anterior, Alberto Hernández Morales de 30 años de edad, vecino de la colonia centro de Tlaxcala, fue puesto a disposición del Agente del Ministerio Público de la Mesa de Detenidos, por delitos cometidos contra funcionarios públicos y lesiones.

Es preciso aclarar, que el litigante acudió a la Procuraduría General de Justicia del Estado, con la intención de abogar por Joel Solares Pérez de 18 años de edad, que fue puesto a disposición del Agente del Ministerio Público de la Mesa de Detenidos, por el ilícito de daño en las cosas, luego de que en aparente estado de ebriedad, lanzó desde el interior de su domicilio botellas de licor y blocks de concreto contra una patrulla de la policía estatal.

Sin embargo, momentos después salió de su domicilio para encarar a los efectivos estatales, quienes lo aseguraron y trasladaron a la Pgje, donde sus familiares intentaron ayudarlo para que evadiera la justicia.

 

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