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  • Pedro Morales
Miles de metros de alambre de cobre han desaparecido.

Huamantla, Tlax.- La red telegráfica de Tlaxcala ha desaparecido, bandas de saqueadores de cobre ya se robaron miles de metros de alambre de cobre, ahora se roban cable telefónico.

El robo hormiga comenzó desde hace al menos cinco años, indicó Josefina Salas Morales, originaria de El Carmen Xalpatlahuaya, quien refirió que en la región oriente el cable de los postes ha desaparecido.

Mostró el daño que ahora mismo se registra, pero del otro lado de la carretera de Huamantla a Xalpatlahuaya, postes desnudos son el indicativo del saqueo impune, de un lado los postes de telégrafos sin alambre.

Del otro lado están los postes de teléfonos de México, sin sus cables y la situación se repite por todos lados, lo mismo en Calpulalpan, Nanacamilpa, que en la zona de Apizaco, Santa Cruz, Panzacola, Zacatelco hasta Puebla.

Prácticamente paralelo a la vía del ferrocarril, los cables de cobre han desaparecido, robo hormiga al que se suma el daño que causan a los ejidatarios al robar las placas de cobre de los transformadores.

Los ladrones aprovechan la soledad del campo, sobre todo por las noches y han sido cientos de transformadores los que se han robado, ya que el daño ha llegado hasta Oriental y Libres en la zona oriente del estado.

El robo de miles de metros de cobre, significa la obtención de miles de pesos, debido a que el alambre es vendido en el mercado negro, con este robo ha desaparecido el telégrafo.

Todo inició con la privatización de Ferrocarriles Nacionales de México, situación que dejó a la deriva importante infraestructura relacionada con el movimiento de los trenes, como es el caso del telégrafo.

Ahora mismo los edificios de las estaciones del ferrocarril se encuentran en plena destrucción, otras han sido invadidas por ilegales centroamericanos y otras más son guaridas y refugio de malvivientes.

Los equipos del telégrafo, que comunicaban en clave Morse ya son piezas de museo, han sido substituidos por la radio comunicación, por lo tanto los saqueadores además del robo de vías, ahora se robaron el alambre.

Como prácticamente ya no hay de donde echar mano, solo falta que se lleven los postes de madera, ahora la modalidad es bajar, cortar y robarse el cable de Teléfonos de México.

El daño es muy grave, porque comunidades enteras se quedan sin comunicación telefónica, pese a los esfuerzos de vigilancia de los municipios, estas bandas siempre actúan en la impunidad, sobre todo por las noches.