- Tlaxco
El presidente de comunidad de El Peñón, perteneciente al municipio de Tlaxco, Gaspar Serrano Rivera, aseguró que las agresiones físicas y psicológicas que sufrió el lunes de la semana pasada fueron planeadas por rivales políticos, ya que durante 20 años al servicio público, ha gozado de buena reputación y con total respeto a las mujeres.
“Tanto la persona que me agredió como su esposa se contradijeron en las declaraciones ante la juez municipal, esto me obliga a realizar las acciones legales conducentes porque temo por mi seguridad y la de mi familia, ya que en mi domicilio particular días antes de la agresión me llegó una carta en la que ya me amenazaban”, explicó.
Recordó que en el transcurso de la semana pasada fue difamado en medios de comunicación al culparlo de una acción que nunca cometió, pues la hora en la que presuntamente fue agredida la mujer, él se encontraba en su domicilio particular con su familia, además de que no conoce a ninguna de las personas involucradas.
“Son hechos infundados, existen contradicciones y los actos son por parte de rivales políticos, en concreto, por parte de miembros del ayuntamiento de Tlaxco y para no entorpecer las investigaciones en estos momentos me reservo a dar nombres, pero estoy seguro de que la ley me dará la razón y los responsables tendrán que pagar”, afirmó.
Reveló que el pasado lunes, alrededor de las 13:00 horas, una persona de nombre Edgardo Tapia Mota, acompañado de tres hombres más, sin razón alguna, lo golpeó en la cabeza y la cara cuando se encontraba sentado en el parque ubicado frente a la presidencia municipal, por supuestamente intimidar a una mujer de nombre Diana Morales.
Relató que el día de los hechos, un oficial de la policía municipal se acercó a auxiliarlo, por lo que los agresores trataron de darse a la fuga a bordo de un vehículo color blanco, pero al ser detenidos, solo fue asegurado uno de los agresores mientras que los otros tres huyeron.
Dijo que en el municipio de Tlaxco acudieron con la juez municipal a fin de reparar el daño, ya que además de las agresiones físicas, le quitaron su teléfono celular, mismo que pagó en efectivo el agresor.
Por lo anterior, Serrano Rivera recordó que es una persona respetuosa y que no cuenta con ningún historial delictivo, por lo que estas acciones solo tratan de desprestigiarlo, ya que en su vida pública y privada no ha tenido problemas similares.