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En lo que va del proceso electoral local, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) han integrado en conjunto un total de 37 expedientes de denuncias por la probable comisión de delitos electorales en Tlaxcala, de los cuales 11 están a cargo de la instancia federal y 26 fueron interpuestas ante la autoridad estatal.
Aun con ello, la Fepade sigue considerando que Tlaxcala registra una incidencia baja en la comisión de delitos electorales en comparación con su vecino estado de Puebla que a estas alturas reporta alrededor de 159 carpetas de investigación, mientras que Veracruz es la entidad con más denuncias a nivel nacional con 177, le siguen Quinta Roo, Ciudad de México, Hidalgo y Tamaulipas.
Para el caso de Tlaxcala, la Fepade confirmó un registro de 11 expedientes iniciados en lo que va del proceso electoral local 2015-2016, la mayoría de esas denuncias corresponden al delito de alteración del Registro Federal de Electores (RFE), seguido en menor cantidad por probable condicionamiento de programas sociales y presión a subordinados.
En tanto que la PGJE informó que a través de la Mesa Especial en Delitos Electorales, han integrado 26 denuncias en su mayoría presentadas por dirigentes o representantes de partidos políticos, y también por candidatos a cargos de elección popular, quienes denuncian distintos actos contrarios a la ley electoral, desde la existencia de bodegas con despensas para la coacción del voto el día de la jornada electoral, hasta la presentación de un supuesto “mapache electoral” detenido en Texoloco cuando repartía calentadores a nombre de la candidata del PRD a la presidencia municipal.
También es preciso recordar que el dirigente estatal del PRD, Juan Manuel Cambrón Soria, se presentó ante la PGJE para ratificar diversas denuncias como la supuesta panfleteo en contra del candidato a la presidencia municipal de Chiautempan, Humberto Vega Vázquez; antes por la utilización de programas sociales de la Sedesol y de Sefoa, y la presión del Sindicato 7 de Mayo contra sus agremiados para apoyar y votar a favor del PRI y sus candidatos.