• Huamantla
  • Sebastián Riverol
El alcohol y la mala organización, nuevamente se llevaron los reflectores

Un total de 19 heridos, dos de ellos de gravedad por herida de asta de toro, de los cuales uno tuvo exposición de viseras, fue el saldo que dejó la tradicional huamantlada, en su edición 63, y la cual destacó nuevamente por el abuso en la ingesta de bebidas embriagantes y la mala organización del evento.

Con casi dos horas de retraso, comenzó la tradicional huamantlada, en la que jóvenes en notorio estado de ebriedad, se jugaron la vida al convertirse en toreros espontáneos y enfrentar a los astados de más de 500 kilos.

Por ello, dos de las personas que se metieron a los circuitos, resultaron heridos de gravedad, ya que uno sufrió de cornada en femoral y el segundo, incluso tuvo exposición de viseras.

Los datos duros de las personas lesionadas no se proporcionaron, debido a que los empleados de la Secretaría de Salud, se negaron a darlos sin argumento alguno, a pesar de que año con año los informan para que los familiares de quienes resulten lesionados, conozcan el lugar y el estado de salud de sus conocidos.

En la edición 63 de la huamantlada, acudieron miles de personas provenientes del estado y de las entidades vecinas de Puebla, Estado de México, Distrito Federal e Hidalgo, principalmente.

La atención de los heridos estuvo a cargo de las ambulancias de la Cruz Roja, Briassa, Cruz Ambar, SESA y de la Coordinación Estatal de protección Civil (CEPC), y de las autoridades municipales.

Aunque el personal de la SESA no confirmó, trascendió que los dos heridos de gravedad, se encontraban en completo estado de ebriedad y ambos serán trasladados al hospital Regional de Tzompantepec.