• Seguridad
Ya había signos de hartazgo social y de permisividad de las autoridades que culminaron en un presunto asaltante asesinado por la muchedumbre

Tras varios connatos de violencia registrados en municipios como Tepetitla o Ixtenco, finalmente el día de ayer, se registró el primer linchamiento en el año que arrebató la vida a un presunto delincuente por la enardecida población de San Pablo del Monte, ante la incapacidad de las fuerzas estatales para dar seguridad al supuesto ladrón y el clamor de justicia ante la inseguridad que se vive en la entidad.

Fue hace tres meses que por días de diferencia hubo un intento de linchamiento por parte de pobladores del municipio de Tepetitla golpearon a cinco personas que supuestamente traficaban estupefacientes, hecho que llevó a la quema de un vehículo y varios paquetes que al parecer eran de mariguana.

10 días antes, en Ixtenco también se desbordó la violencia cuando la población respondió a un operativo policíaco en el que la policía estatal habría evitado contener la turba y se salieron de control los ánimos, resultando personas heridas, una de ellas vinculada supuestamente a la delegada de la SEDESOL en Tlaxcala, Mariana González Foullon.

El día de ayer, la intervención de los uniformados no fue suficiente para detener la turba que a golpes quitó la vida a un joven de 30 años que se presume fue parte de los delincuentes que momentos antes hurtaron una camioneta tras haber amenazado con una arma de fuego a sus propietarios.

Las autoridades ya saben que la población está harta del alza en los delitos y la ineficiente expedición de justicia, lo que ha llevado a que se tomen este tipo de acciones que podrían replicarse en otros municipios si no se toman medidas a la altura de las necesidades y reclamos de la ciudadanía.

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