- Congreso
Tras su fracaso en las urnas por el rechazo generalizado de la población hacía los diputados locales que buscaron reelegirse o un puesto de elección popular federal, los legisladores pretenden tapar todas las supuestas anomalías en las que pudieron haber incurrido con la aprobación de la Cuenta Pública del Congreso del Estado hasta agosto de 2018.
Los excesos de los congresistas ha sido tal que hay alrededor de ocho millones de pesos cuyo destino se desconoce, sumado a los 25 millones que se gastaron en la remodelación del Congreso realizada en una supuesta sociedad entre Mariano González Aguirre y Juan Carlos Sánchez García “Saga”, quienes serían los responsables de haber despilfarrado una cantidad excesiva.
Pese a este dinero gastado en el edificio público, nuevamente los diputados locales tuvieron una erogación de 1.6 millones de pesos para materiales de construcción, mantenimiento y reparación de las oficinas recién remodeladas.
Aunque hay pendientes como el tema del Sistema Estatal Anticorrupción, los legisladores no repararon en gastos y derrocharon 1.4 millones de pesos en alimentación sólo en tres meses, entre algunos otros excesos que ahora pretenden dejar aprobados para que la próxima legislatura no vaya a husmear.
El responsable sería el presidente del Comité de Administración, Mariano González Aguirre, quien cayó derrotado en su intento de llegar a ser diputado federal, siendo escudado por su empleado “el Saga”, a quien le dejó el “changarro” mientras se fue de campaña,