• Seguridad
  • Pedro Sierra
El Ayuntamiento presumió la próxima adquisición de 20 patrullas nuevas mientras que no se opera con los elementos policiacos indispensables para la población del municipio de Tlaxcala

Con bombo y platillo las autoridades del municipio de Tlaxcala presentaron su nuevo programa denominado, “Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia 2018”, en el que se presume la futura adquisición de 20 patrullas y la inversión de dos millones de pesos en vertientes de proximidad social y justicia cívica, con el objetivo de disminuir los índices de violencia y delincuencia en el municipio desde su origen, olvidando que hace un año y siete meses presumió que se utilizarían las nuevas tecnologías para frenar la inseguridad en la capital del estado.

Los dos millones de pesos y las 20 patrullas nuevas fueron presumidos por el Ayuntamiento capitalino, sin embargo, los 120 policías municipales con los que cuenta la comuna son insuficientes de acuerdo con los requerimientos mínimos que se exige por habitante para este rubro, lo que se traduce en la falta de elementos para atender situaciones como la ocurrida en días pasados en la casa de la ex síndico del municipio, ya que tras haber solicitado ayuda, los uniformados llegaron casi media hora después.

En términos reales las autoridades capitalinas invertirán en el 2018 sólo dos millones de pesos más, pues los otros 10,8 millones de pesos que mencionó ayer se reciben cada año a través del Fortaseg, mismos que también se obtuvieron y ejercieron el año pasado.

Y es que mientras se estima una población estimada en 120 mil habitantes para el municipio, sólo hay 120 policías en dos turnos, lo que implicaría un desfase de más de 100 elementos si se considera el estándar que por cada mil pobladores debe haber 1.8 uniformados es decir para Tlaxcala capital debería haber entre 180 y 230.

La nueva estrategia olvida la presunción con la que iniciaron las autoridades para atacar el narcomenudeo que sería erradicado de las instituciones educativas, así como la proximidad selectiva en la que han incurrido, ya que se crearon alrededor de 300 grupos de vecinos vigilantes por medio del whatsapp, sin embargo, estos sólo agrupan a cinco mil de los casi 120 mil habitantes.

Esta modalidad ha creado marginación con ciertos grupos de la población pero además se ha visto rebasada debido a la tardanza con la que han atendido el llamado los elementos de la policía municipal, lo que ha permitido que en la capital del estado actúen grupos criminales sin mayor preocupación.

Ademas, los drones que se adquieron el año pasado para reforzar las acciones de vigilancia ya fueron olvidados, pues ayer ni siquiera se volvió a mencionar el uso de esa tecnología que al parecer no sirvió para nada.

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